Repudiable agresión a Atlético Parana en Catamarca

La dirigencia, alegre e indignada

FOTOS: ‏@CAtleticoParana

José Cáceres y César Fontana manifestaron su satisfacción por haber llegado a la Cuarta Fase, la final por el ascenso. Además, los principales directivos del Decano mostraron su malestar por la violencia sufrida por parte de sus pares de Unión Aconquija y la policía de Catamarca.

EL DIARIO DE PARANA

Los dirigentes de Atlético Paraná fuertemente custodiados como si fueran delincuentes. Realmente lamentable.

Foto: Los dirigentes de Atlético Paraná fuertemente custodiados como si fueran delincuentes. Realmente lamentable.

Atlético Paraná consiguió ayer una clasificación histórica a la final del Torneo Federal A, que lo deja en las puertas del ascenso a la Primera B Nacional, tras perder ayer 1 a 0 con Unión Aconquija en Andalgalá y hacer pesar la diferencia de 5 a 2 obtenida en el partido de ida.
Pero lo que todo debía ser alegría y euforia, se vio opacado por el maltrato que recibió la delegación Decana por parte del público local, los dirigentes del Estanciero y la policía de Catamarca.
José Cáceres, presidente de la entidad de barrio San Martín de la capital entrerriana, en primer lugar contó su satisfacción por lo hecho por el Gato: “Estamos realmente muy felices por haber clasificado a la final. Hicimos una epopeya en Paraná, en un partido que quedará en la historia grande de nuestro club. Poder llegar a una final, en nuestra primera incursión en el torneo, es algo realmente fantástico. Hace cinco meses festejamos el ascenso y ahora estamos muy cerca de otro, algo histórico. Por su puesto que si nos toca tener una adversidad deportiva nos vamos a poner tristes, pero no nos vamos a olvidar nunca de este campeonato histórico. Pero le tengo mucha fe a este equipo, que sabe lo que es hacer hazañas”.
Posteriormente, el titular de la institución se mostró ofuscado por la pésima manera que fue tratada la delegación Rojiblanca. “La dirigencia y la policía ha actuado mal con nosotros. Nosotros respetamos y tratamos bien a toda la gente que nos visita, nunca nos comportamos mal con nadie”, manifestó molesto.

UN VICE EMOCIONADO. Con lágrimas en los ojos, César Fontana también manifestó su felicidad por estar a sólo dos pasos de llegar a la Primera B Nacional.
“Es una satisfacción enorme haber llegado a la final en nuestra primera participación en este certamen -sostuvo el histórico dirigente-. Pese a que con toda la comisión directiva hemos trabajado mucho para esto, era algo realmente impensado”.
Además, el vicepresidente del club, tampoco ocultó su malestar por violenta bienvenida que recibieron: “Desde que llegamos a esta ciudad sufrimos incidentes. Primero fue la ruptura del colectivo; después lo que pasó con ustedes, los periodistas, y que nos saquen de la cancha antes. Todo eso hace que esto se disfrute el doble”.

Textual
“Los policías nos entregaron a la salida del vestuario y nos ca… a palos y piedrazas .A Pipo (por Mariano Echagüe) le cortaron la frente y a mí en el brazo me pagaron un piedraza”, dijo Damián Serrano

APUNTES DESDE EL LLANO
* DESTROZOS AL POR MAYOR. Una mala noche pasaron los jugadores de Atlético Paraná. Fue porque a las 1.30 del domingo, un grupo de unos 30 inadaptados se hicieron presentes en el hotel Confort donde concentró el plantel para molestar y no dejarlos descansar. Empezaron a lanzar bombas de estruendo, además de estar con un auto y altos parlantes con música hasta las seis de la mañana. Pero no sólo fue eso, sino también pintaron con aerosol todo el frente y un costado del micro que trasladó a la delegación y desinflaron las dos ruedas delanteras del colectivo. Por lo que cuando los choferes se levantaron, se encontraron con esa ingrata noticia pero rápidamente fueron solucionados los inconvenientes.
* IMPEDIMENTO PARA TRABAJAR. Los medios de prensa que se hicieron presentes desde la capital entrerriana (EL DIARIO, Radio La Voz y Canal Once) no pudieron realizar su tarea como corresponde por disposición e impedimento del presidente de la entidad, Octavio Gutiérrez –además es Secretario de Planeamiento del gobierno de Catamarca-, quien de mala manera impidió el ingreso de los periodistas al estadio. Por lo tanto, tuvieron que trabajar ubicados detrás de un arco, sin corriente eléctrica y ubicándose en un tablón, ingresando como si fuesen colaboradores de la institución Decana con entradas de protocolo.
* MALTRATO DIRIGENCIAL Y POLICIAL. El titular de la entidad de Aconquija ni bien llegó al estadio se predispuso de muy mala manera con los dirigentes Decanos. Ordenó a sus secuaces y policías que no dejasen entrar a nadie de Paraná, a los gritos e insultando. Además, los efectivos policiales allí apostados inmediatamente corrieron hacia ese lugar y a los empujones con los escudos protectores trataron de correr a dirigentes, colaboradores del club y periodistas, sin necesidad alguna.
 

Crónica de un hecho lamentable y repudiable


La barbarie tampoco los venció


Los jugadores de Atlético Paraná debieron soportar durante todo un día hechos extrafutbolísticos que deben llamar a la reflexión de los dirigentes del Consejo Federal de la AFA. La integridad física de los mismos estuvo en peligro y nadie se hizo responsable de ello. Los directivos de Unión Aconquija y la policía de Catamarca fueron cómplices de los sucesos violentos. No obstante ello, el Decano ahora tiene la mente en su rival por el ascenso, Sportivo Patria de Formosa. El partido se juega a las 20.30.


Darío Albertini
dalbertini@eldiario.com.ar


Otra vez la violencia en el fútbol dijo presente. Y en esta oportunidad las víctimas de la barbarie fueron los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes y colaboradores de Atlético Paraná, que el pasado domingo estuvieron en la localidad catamarqueña de Andalgalá para disputar el partido revancha semifinal del Torneo Federal A frente a Unión Aconquija. Se sabía que por estar en juego la clasificación a la final por un ascenso a la Primera B Nacional, la cosa no iba a ser tan sencilla. Pero nadie se imaginó que iba a pasar lo que finalmente sucedió.
Y lo peor de todo ello, es que los propios dirigentes del Estanciero, incluso su presidente Octavio Gutiérrez, no estuvieron ajenos a los hechos violentos e incluso la policía de esa localidad fue cómplice de los inadaptados. Esto es para tener en cuenta, que debe llamar a la reflexión y ser observado por los dirigentes del Consejo Federal de la AFA, que tienen bajo su órbita este campeonato, para que tomen medidas al respecto y en un futuro no vuelva a suceder lo mismo con equipos que deban visitar la provincia de Catamarca.
No es común ver los destrozos que sufrió el micro que trasladó al plantel Decano (vidrios pintados, desinfladuras de neumáticos, rotura de ventanillas en la noche previa y luego del encuentro); maltrato hacia dirigentes y colaboradores de la entidad de barrio San Martín, y también periodistas que fueron a cubrir el encuentro –se les prohibió el ingreso al estadio para desarrollar sus tareas-, antes y al finalizar el cotejo, siendo el propio presidente de la entidad local el promotor de los incidentes; y agresiones físicas que debieron soportar los futbolistas y cuerpo técnico al abandonar el estadio, que pudo tener consecuencias aún más graves que las lesiones de Mariano Echagüe y Damián Serrano.
Lo que causó indignación, impotencia y bronca, fue que en todo lo sucedido los efectivos policiales –que deberían estar para prevenir y garantizar la seguridad de las personas- hicieron la vista a un costado, dejaron la zona liberada y hasta ellos mismos, los que estaban vestidos de civil, tuvieron participación en la golpiza que recibieron los integrantes de la delegación paranaense antes de subir al ómnibus a la salida del estadio. Y un claro ejemplo es que los hinchas allí ubicados lanzaron piedras, palos, rompieron nueve vidrios del colectivo y no hubo ningún detenido. Por supuesto que en horas de la noche, los dirigentes del Club Paraná realizaron la denuncia correspondiente en una dependencia policial antes de emprender el viaje de regreso.
Después de todo lo sucedido, el plantel Decano recién cerca de las 23 horas del domingo pudo emprender el retorno a la capital entrerriana y su largo viaje no fue bueno, ya que no pudieron descansar por el frío que ingresaba al interior del micro por las ventanillas rotas que no alcanzaron a ser cubiertas por los colchones que colocaron. Pasadas las 11 de ayer, los jugadores llegaron a la sede de calle Ruperto Pérez, desde allí se dirigieron hacia sus hogares y pudieron dormir tranquilamente después de dos noches sin hacerlo.
Así se cerró un fin de semana para olvidar rápidamente. Lo único satisfactorio, que no es menor, fue que se quedaron con el pasaje a la final por el ascenso a la Primera B Nacional, a pesar de la derrota por 1 a 0 pero en el resultado global fue victoria por 5 a 3. En esta ocasión, la barbarie tampoco pudo vencerlos.

 

MAL MOMENTO. Antes, durante y después del partido revancha semifinal con Unión Aconquija, los jugadores, dirigentes, colaboradores y periodistas que siguieron al elenco paranaense recibieron agresiones de simpatizantes y de la misma policía de Catamarca. En la noche previa al encuentro los futbolistas no pudieron dormir en el hotel en donde estaban concentrados, el micro fue blanco de pintadas, le desinflaron los neumáticos y le rompieron un vidrio. Mariano "Pipo" Echagüe sufrió lesiones en su cabeza. Una verdadera locura...

Fotos gentileza: Elonce Gol (Desde Catamarca)

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Lunes 01 de diciembre de 2014, 21:24