Se acabo el ciclo de Hugo Fontana en Belgrano
El entrenador que dirigió a Belgrano en los últimos tres años, confesó que más allá de que el equipo hubiese logrado la clasificación, su alejamiento ya estaba decidido porque había un “desgaste deportivo”. Además, habló del último torneo que jugó el Mondonguero y la no obtención del objetivo.
Todo proceso tiene un principio y un final, es la ley de la vida. Y el lunes por la tarde se cerró el ciclo de Hugo Fontana como entrenador de Belgrano. Luego de tres años dirigiendo el primer equipo del Mondonguero, con el cual incursionó en la competencia doméstica (Liga Paranaense) y en certámenes nacionales (Torneo del Interior, Argentino B y Copa Argentina), además de los tres años previos en los cuales el DT paranaense estuvo abocado a la formación de chicos en la entidad, Tony decidió en común acuerdo con la dirigencia Albiceleste que era momento de dar un paso al costado.
El motivo principal fue el “desgaste deportivo”, según lo explicó el mismo Fontana a EL DIARIO en una charla que se desarrolló ayer.
“Todos los que estaban dentro del sistema del club sabían de la existencia de un desgaste deportivo. Esto yo se lo había manifestado a mi vínculo más cercano, de que por más que clasificara ya tenía tomada la decisión de dejar el cargo, principalmente para que la institución comenzara el nuevo año con otra conducción y con nuevos aires, porque es bueno renovar”, explicó el director técnico de 35 años.
CONFORME Y AGRADECIDO. Reflexionando un poco sobre esta etapa en la cual estuvo vinculado a Belgrano, quien también fue jugador del club y hasta consiguió títulos de la LPF, dijo que “en este proceso de casi seis años me voy con una sensación deportiva muy buena, con la gran mayoría de los objetivos cumplidos. Esta temporada lamentablemente no lo pudimos hacer. Pero se que son más las cosas positivas que negativas que uno deja y se lleva”.
A su vez, expresó que se marcha con “una gratitud total hacia todos, no solo para con la institución, sino también los dirigentes, todos los jugadores que han pasado, la gente que trabaja en el club y todas las personas que forman parte de Belgrano”.
Por otra parte, quien tuvo su formación futbolística en Sportivo Urquiza, contó que “la decisión fue de común acuerdo con la dirigencia. Me llamó el presidente (Alejandro Schneider) y cuando me dio su opinión no tuve problema en aceptarlo”, y agregó: “Siempre estuve abierto al diálogo y lo que ellos optaran para el bien del club sería bien recibido”.
-¿Qué pasó en esta temporada que no lograron el objetivo de clasificar?
-En el armado del equipo nunca pudimos encontrar el mejor once por diferentes factores. Influyeron las expulsiones, lesiones y decisiones tácticas, de las cuales me hago totalmente responsable. También tuvimos una gran irregularidad por falta de maduración de algunos jugadores, principalmente de la gente joven con el compromiso, porque hay veces que el jugador tiene que entender que cuando uno le marca ciertas cosas es por el bien colectivo.
-¿Faltó mayor experiencia en el plantel para afrontar los partidos claves?
-Tuvimos un caudal grande de jugadores, de los cuales aproximadamente diez tenían experiencia en la categoría y cuatro de ellos contaban con un respaldo importante como Ramírez, Chiavarini, Cáceres y Suárez. Después hubo un par con algunas pretemporadas y otros jugadores de la Liga que se fueron acoplando al proceso. Creo que la parte positiva fue que varios chicos hicieron su debut en la categoría, por lo cual el cuerpo técnico trabajó para potenciarlos y que el club cuente ahora con jugadores que ya saben lo que es este torneo. Esto puede ser que nos haya llevado a tener resultados irregulares, principalmente como visitantes, donde perdimos mucho más de lo que ganamos. Como locales no perdimos pero empatamos mucho, nos costó ser protagonistas en nuestra cancha.
-¿Por qué se terminó dando una zona tan pareja?
-La irregularidad de este grupo se dio a que la gran mayoría de los equipos se armaron este año, pregonando la utilización de jugadores jóvenes con poca experiencia. Viale mantuvo una base y por eso logró este buen cierre de año. Unión de Sunchales fue el que logró mantener la mayor base de años anteriores y eso se notó porque fue el que más marcó la diferencia. Y el resto, incluidos nosotros, llevó a que termináramos apretados en la tabla por la gran paridad.
-Tuviste la chance en este último tiempo de dirigir a varios chicos que conociste en las inferiores cuando recién llegaste ¿Es gratificante ver que la formación dio sus frutos?
-Volvimos a resurgir una cantera interesante en el fútbol de Paraná y pudimos colocar en el lugar que se merece una de las instituciones más añejas de la ciudad. Me deja una sensación linda de que hemos podido potenciar a muchos chicos, a lo que debo agradecerles a los clubes de la Liga porque cuando fuimos a buscar a varios de sus chicos para este proyecto nos dieron su apoyo. Hoy en día hay muchos de estos jugadores que pegaron el salto y están jugando en diferentes clubes en inferiores de AFA y otros llegaron a la primera de Belgrano.
Futuro incierto
“Lo que va a pasar ahora, uno no lo sabe. El tiempo dirá y por el momento tendré que esperar mi oportunidad para seguir dirigiendo”, reconoció Fontana, quien ha demostrado una capacidad importante y es uno de los entrenadores locales con mayor proyección, principalmente por lo que ha conseguido a su corta edad.
“Tengo 35 años y me queda una larga carrera por delante, por lo que no tengo ningún apuro. Por lo pronto me seguiré capacitando y aprendiendo, además de analizar lo que hice bien y mal en estos tres años para seguir potenciándome como persona y entrenador”, explicó quien ahora se tomará unos días para descansar y disfrutar de la familia.
-¿Aceptarías volver al nivel formativo?
-Tendría que ser un proyecto muy serio, como fue el que tuvimos en Belgrano, entendiendo que para que se noten los frutos tiene que durar entre cuatro y cinco años, algo de lo que estoy convencido.
El motivo principal fue el “desgaste deportivo”, según lo explicó el mismo Fontana a EL DIARIO en una charla que se desarrolló ayer.
“Todos los que estaban dentro del sistema del club sabían de la existencia de un desgaste deportivo. Esto yo se lo había manifestado a mi vínculo más cercano, de que por más que clasificara ya tenía tomada la decisión de dejar el cargo, principalmente para que la institución comenzara el nuevo año con otra conducción y con nuevos aires, porque es bueno renovar”, explicó el director técnico de 35 años.
CONFORME Y AGRADECIDO. Reflexionando un poco sobre esta etapa en la cual estuvo vinculado a Belgrano, quien también fue jugador del club y hasta consiguió títulos de la LPF, dijo que “en este proceso de casi seis años me voy con una sensación deportiva muy buena, con la gran mayoría de los objetivos cumplidos. Esta temporada lamentablemente no lo pudimos hacer. Pero se que son más las cosas positivas que negativas que uno deja y se lleva”.
A su vez, expresó que se marcha con “una gratitud total hacia todos, no solo para con la institución, sino también los dirigentes, todos los jugadores que han pasado, la gente que trabaja en el club y todas las personas que forman parte de Belgrano”.
Por otra parte, quien tuvo su formación futbolística en Sportivo Urquiza, contó que “la decisión fue de común acuerdo con la dirigencia. Me llamó el presidente (Alejandro Schneider) y cuando me dio su opinión no tuve problema en aceptarlo”, y agregó: “Siempre estuve abierto al diálogo y lo que ellos optaran para el bien del club sería bien recibido”.
-¿Qué pasó en esta temporada que no lograron el objetivo de clasificar?
-En el armado del equipo nunca pudimos encontrar el mejor once por diferentes factores. Influyeron las expulsiones, lesiones y decisiones tácticas, de las cuales me hago totalmente responsable. También tuvimos una gran irregularidad por falta de maduración de algunos jugadores, principalmente de la gente joven con el compromiso, porque hay veces que el jugador tiene que entender que cuando uno le marca ciertas cosas es por el bien colectivo.
-¿Faltó mayor experiencia en el plantel para afrontar los partidos claves?
-Tuvimos un caudal grande de jugadores, de los cuales aproximadamente diez tenían experiencia en la categoría y cuatro de ellos contaban con un respaldo importante como Ramírez, Chiavarini, Cáceres y Suárez. Después hubo un par con algunas pretemporadas y otros jugadores de la Liga que se fueron acoplando al proceso. Creo que la parte positiva fue que varios chicos hicieron su debut en la categoría, por lo cual el cuerpo técnico trabajó para potenciarlos y que el club cuente ahora con jugadores que ya saben lo que es este torneo. Esto puede ser que nos haya llevado a tener resultados irregulares, principalmente como visitantes, donde perdimos mucho más de lo que ganamos. Como locales no perdimos pero empatamos mucho, nos costó ser protagonistas en nuestra cancha.
-¿Por qué se terminó dando una zona tan pareja?
-La irregularidad de este grupo se dio a que la gran mayoría de los equipos se armaron este año, pregonando la utilización de jugadores jóvenes con poca experiencia. Viale mantuvo una base y por eso logró este buen cierre de año. Unión de Sunchales fue el que logró mantener la mayor base de años anteriores y eso se notó porque fue el que más marcó la diferencia. Y el resto, incluidos nosotros, llevó a que termináramos apretados en la tabla por la gran paridad.
-Tuviste la chance en este último tiempo de dirigir a varios chicos que conociste en las inferiores cuando recién llegaste ¿Es gratificante ver que la formación dio sus frutos?
-Volvimos a resurgir una cantera interesante en el fútbol de Paraná y pudimos colocar en el lugar que se merece una de las instituciones más añejas de la ciudad. Me deja una sensación linda de que hemos podido potenciar a muchos chicos, a lo que debo agradecerles a los clubes de la Liga porque cuando fuimos a buscar a varios de sus chicos para este proyecto nos dieron su apoyo. Hoy en día hay muchos de estos jugadores que pegaron el salto y están jugando en diferentes clubes en inferiores de AFA y otros llegaron a la primera de Belgrano.
Futuro incierto
“Lo que va a pasar ahora, uno no lo sabe. El tiempo dirá y por el momento tendré que esperar mi oportunidad para seguir dirigiendo”, reconoció Fontana, quien ha demostrado una capacidad importante y es uno de los entrenadores locales con mayor proyección, principalmente por lo que ha conseguido a su corta edad.
“Tengo 35 años y me queda una larga carrera por delante, por lo que no tengo ningún apuro. Por lo pronto me seguiré capacitando y aprendiendo, además de analizar lo que hice bien y mal en estos tres años para seguir potenciándome como persona y entrenador”, explicó quien ahora se tomará unos días para descansar y disfrutar de la familia.
-¿Aceptarías volver al nivel formativo?
-Tendría que ser un proyecto muy serio, como fue el que tuvimos en Belgrano, entendiendo que para que se noten los frutos tiene que durar entre cuatro y cinco años, algo de lo que estoy convencido.
Gastón Weimer
El Diario de Paraná
Miércoles 10 de diciembre de 2014, 17:47
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