Tiro Federal 2 - Cruz del Sur 0
Tiro se va a Bariloche con un par de chocolates en rama en los bolsillos
¿Cuánto cotiza la victoria de Tiro Federal para viajar a Bariloche a definir la serie? A juzgar por el flojo rendimiento del equipo, sin dudas que el 2-0 es un buen resultado. Ahora, si se mide la categoría del rival --al que le faltaron los dos goleadores e igual complicó-- no habría que confiarse demasiado.
El aurivioleta tuvo en dos actos de inspiración la carta del triunfo: un exquisito tiro libre de Filippini y una magistral acción de Juan Abaca, con dos enganches para el aplauso y un zurdazo con categoría de goleador.
La primera fracción estuvo de más. El terreno, complicado por los charcos, tras una intensa precipitación, trastocó los planes tirenses y le cayó a la medida a un Deportivo Cruz del Sur ordenado, con una defensa firme y un mediocampo elástico, que hasta se animó a hilvanar un par de ataques.
Zambrano, atacando por el sector menos afectado, tuvo a maltraer a Matías López y generó la acción más clara ante el golero Lezcano. No fue gol porque el "9" le pegó al primer palo, cuando se imponía la comba al segundo.
Tiro, en contrapartida, chocó contra sus propias limitaciones. Con Lefinir de primer central --cumplió--, perdió presencia en el medio y se limitó a resolver con los intentos de Leobono (pelota parada) o los arrebatos de Ceccani (chocó demasiado). Encima, Filippini y Cafasso se la pasaron tratando de resolver cómo trasladar el balón entre tantas lagunas.
En el complemento cambió el panorama. Filippini hizo pie, los delanteros encontraron receptores y hubo un equipo mucho más corto.
Encima, el "Negro" frotó la lámpara en un tiro libre; la pelota hizo patito y se tornó imposible para el golero Luna.
Un rato antes el propio Filippini le reprochó a Martínez Miños (la mandó a las nubes) el no dejarle patear desde posición similar.
Luego volvieron los desencantos: se lesionó Leobono, el equipo retrocedió demasiado y la visita se puso a tiro del empate: Zambrano exigió una gran intervención de Lezcano.
Con el ingreso de Grassi por Bruno Díaz, en los minutos finales, el local cobró algo de protagonismo. Matías López se ubicó de carrilero por derecha y desde allí buscó la cabeza de Abaca en un centro perfecto. Claro que Juan no estuvo certero y se quedó masticando bronca.
A 6 del final hubo revancha. Pase milimétrico de Failippini, doble enganche de Abaca y festejo a grito pelado.
En Bariloche continuará esta historia...
LA NUEVA BAHÍA BLANCA
Lunes 19 de enero de 2015, 07:53
