Ferro (GP) 1 Cipolletti 2
Cipolletti se llevó tres puntos y algo más…
Por Miguel Busso
Las derrotas de local siempre duelen más que otras. Y a Ferro la caída de ayer ante Cipolletti por 2 a 1 le tiene que doler, para poder reaccionar lo antes posible y, como lo dijo su entrenador en la conferencia: para seguir madurando. Un proceso que a algunos le lleva poco y a otros mucho tiempo.
VIDEO: CIPOLLETTI TV.
Cipolletti fue ayer un claro ganador. No con esto queremos decir que lo pasó por arriba o que lo dominó a este Ferro que, entre otras cosas perdió el invicto con este resultado adverso.
Pero la claridad cipoleña pasó por un plantel donde el orden para defender como para buscar los ataques, fue muy interesante.
Parecía, por lo que se decía en la semana, que Pancaldo no sabía cómo armar el equipo por ausencias generadas producto de lesiones y expulsiones. Y si varios de los que formaron el equipo titular rionegrino no eran titulares hasta ayer, seguramente lo pasarán a ser de aquí en adelante.
Ferro trató de hacer lo que más le había rendido hasta el momento. Soltar a sus laterales como un atacante más, a eso sumarle también los carrileros, algo que no sin dudas complicó el trabajo defensivo visitante, porque de ese juego empezaron a llover pelotas cruzadas sobre el arco de Caprio, que obligaron a un gran trabajo de los centrales, especialmente Lamolla que terminó siendo figura de su equipo y del partido, porque cuando fue a cabecear al área de enfrente metió un frentazo inatajable que abrió el marcador en el barrio Talleres.
El primer tanto de la visita llegó a los 40 minutos de ese primer tiempo. Y en esa acción se conjugó el mérito de Torresi en la ejecución del corner que buscó directamente la entrada de Lamolla al medio del área, el frentazo del central y la falta de capacidad defensiva para frenarlo, sabiendo que es un central con muchos goles hechos de esta manera.
De todos modos, minutos antes de que llegara el primer gol de Cipolletti, este duro rival que tuvo Ferro en su cancha, ya había logrado mandar en el mediocampo, con jugadores con muy buen manejo del balón, caso Torresi, Carrasco y Avila, que mostraron una gran capacidad para ocupar espacios, no despilfarrar pelotas y, fundamentalmente darle juego a los dos de arriba, Abraham y Sosa que, en más de una oportunidad, supieron complicar al fondo verde.
Ferro decididamente se mostró con muchas dudas en todas las líneas. Los de arriba fueron absorbidos por la defensa rival. En el medio, la ausencia de Rinaldi pareciera haber quitado mucho juego de cara al arco de enfrente. Y la defensa, no sólo tuvo inconvenientes para tomar a dos atacantes potentes que trajo Cipolletti, sino que a la hora de salir jugando no fueron claros y en más de una oportunidad la pelota fue tomada sobre la misma salida por esos dos delanteros mencionados, poniendo en apuros a Pontet y compañía.
Ferro, ante el resultado adverso, intentó reaccionar, Cocchi tomó la “bandera” de ese intento de levantada y antes de que se muera el primer tiempo tuvo una buena aparición por derecha a la que le faltó encontrar un “socio” en un centro corto que terminó salvando la defensa rionegrina.
El arranque del complemento siguió mostrando a Ferro atacando por los costados, buscando en las pelotas que terminaban siendo centros a la cabeza de Blanco, que tuvo un par de chances, pero también Alexis mostró en sus definiciones falta de precisión para poder convertirse en el hombre gol que Ferro siempre espera tener en el “9”.
Cipolletti definitivamente plantó a la línea de volantes en su campo, muy cerquita de los cuatro del fondo y esperó el momento de contragolpear. Como era de esperarse, hizo todo lento, pero con un mérito inocultable que fue el manejo del balón con jugadores que lo hicieron muy bien y que por ahí uno no los tenía entre los referentes de ese juego, caso Marcos Carrasco.
El adelantamiento de Ferro, metiendo a los laterales como punteros derecho e izquierdo, no le sirvió de mucho y, en cambio, en una contra muy clara a los 15 del segundo tiempo, Parra se soltó por derecha, cambió de frente para la aparición de Carrasco por izquierda, este metió un centro bajo que no pudo tocar Abraham, pero la pelota siguió cruzando el área quedándole en los pies de Sosa que, con todo a favor fusiló a Pontet y aseguró la ventaja de su equipo.
Ante ese panorama adverso, ya que eran dos los goles que había que remontar, Giganti tiró todos los delanteros que tenía en el banco, Merlo y González. Así, cada pelota en el área visitante fue una lucha titánica entre la presión verde y los apuros albinegros para sacarla.
En esa búsqueda le contabilizamos una muy clara a Hermida buscando a Blanco, pero el delantero no pudo tocarla, que era lo único que faltaba para el gol.
Merlo complicó en el juego aéreo a los centrales rivales que, hasta a esa altura ya le habían salido “chichones” de cabecear tantas pelotas.
Lo cierto es que los minutos se consumieron sin que Ferro pueda dar vuelta esta historia.
Sobre el minuto ‘90, el árbitro le cobró un penal a favor de Ferro por falta de Lamolla sobre “Chula” González, que Hermida cambió por gol, que metió al partido en un final emotivo pero ya sin tiempo para terminar de salvar, al menos, el invicto y a la vez rescatar un punto que no es lo ideal en esta idea de sumar bien, pero es algo más que quedarse sin nada.
Fuente: foto y texto: Diario La Reforma - General Pico
Lunes 11 de mayo de 2015, 07:28