SUSPENDIDO EL CLÁSICO SALTEÑO

Los barras vuelven a ganar el clásico

Lamentable: Nuevamente los barras de Juventud Antoniana consiguieron lo que se propusieron desde un principio, que el  superclásico entre Central Norte y Juventud Antoniana fuese suspendido por el árbitro Federico Guaymas Tornero. Un grupo mínimo de hinchas "santos" tomaron las decisión de subirse al parapelotas luego de la salida de los equipos al campo de juego.

En Salta se suspendió el superclásico salteño entre Central Norte y Juventud Antoniana por la decisión adoptada por un grupo minúsculo de barras del equipo antoniano que decidieron subirse al alambrado y demostrarle a todos los presentes que podían parar el partido. Todo esto porque la dirigencia decidió no darles entradas de favor a las agrupaciones. Alrededor de 13 mil personas se vieron perjudicadas por esta actitud patotera de estos personajes que encima contaron con la inacción policial que ni siquiera los detuvo una vez determinada la suspensión del encuentro.

El árbitro del partido, Federico Guaymás, esperó por un tiempo más que prudencial para que estos sujetos se bajaran y depusieran su actitud subersiva. Despúes de 35 minutos se acercó al sector sur del Estadio Martearena, los instó a bajarse nuevamente y tras no haber respuesta suspendió el encuentro sin que se haya jugado un solo minuto.

En definitiva, los barras de Juventud Antoniana lograron su propósito y consiguieron el objetivo planteado desde un principio, que era parar el  superclásico. Los informes del árbitro y el veedor se elevarán a las autoridades pertinentes y desde el Consejo Federal se resolverá sobre el tema. Seguidamente, ambos clubes deberán emitir sus correspondientes descargos. Pero el panorma es complicado para la institución de Lerma y San Luis por los antecedentes mediatos sobre este tipo de situaciones. Conociendo como actuó el Tribunal de Faltas del Consejo Federal a Juventud le cabrá una dura sanción desde el aspecto económico y habrá que estar atento si también ahora se ve perjudicado desde lo deportivo ya que podría sufrir también hasta la pérdida de puntos si es que el partido no vuelve a jugarse.

El presidente de Central Norte, José Macaione, anunció que se reservará el dinero que estaba destinado para el pago de los adicionales de policía por considerar que la policía no hizo debidamente su papel. Son más de 30 mil pesos los que debía abonar por este concepto.
Fuente: Arenga Deportiva

"NO HABÍA FORMA DE DETENERLOS"

El comisario Bernabé Alvarez, a cargo del operativo de seguridad en el estadio Padre Martearena, habló con El Tribuno sobre la suspensión del clásico por culpa de los hinchas de Juventud. “No había forma de detenerlos. Ellos estaban arriba. Se pudo ver que no solamente eran las 13 personas que subieron al parapelota, sino que toda la parcialidad que estaba en la popular los apoyaba, porque si no hubiera sido así, la propia hinchada de Juventud les hubiera convencido de que depongan de esa actitud”, explico.

Con respecto al diálogo de la Policía por la situación planteada con el árbitro y el veedor, para brindar las garantías del caso, Alvarez opinó: “Nosotros en todo momento le avisamos al árbitro y al veedor de la AFA que la seguridad del partido estaba dada. Pero ellos manifestaron que si la gente seguía arriba del parapelota no se iba a jugar, por cuanto era peligroso, porque si se llegaban a caer, quién se iba a ser responsable. Ante todo esto, decidieron suspender el partido”. Se refirió también a la intención de persuadir a estos hinchas para que depongan de esta actitud. “Fueron los propios jugadores de Juventud y otra gente a tratar de convencerlos, pero no hubo caso y siguieron con esa actitud osca. Eran 13 personas que no dejaban empezar el partido y pidieron que se haga presente el presidente de Juventud Antoniana, para que les entregue entradas de favor, porque manifestaron que había gente que se había quedado afuera”. Y agregó: “Este en ningún momento ingreso al lugar y contestó que Juventud era visitante y no había forma de entregar las entradas de favor”. 

10 detenidos

  A la Comisaría Segunda fueron trasladadas 10 personas en calidad de detenidas, indentificadas como hinchas de Juventud, quienes se dirigían en las líneas 7A y 7D hacia el estadio Padre Martearena, las cuales causaron daños en el medio de transporte urbano de pasajeros. Después, en el propio estadio Martearena, se procedió a la detención de 3 personas: una menor con estupefaciente y picadura de marihuana y otros dos por el mismo procedimiento.  

La prohibición

  La Policía aplicó la prohibición de ingresar al estadio a 18 hinchas de Central Norte: 8 fueron identificados en un enfrentamiento previo y 10 en estado de ebriedad. En tanto, 42 hinchas del santo tampoco pudieron entrar, de los cuales 18 fueron identificados por los incidentes del clásico anterior y 24 en estado de ebriedad. Por otra parte, pasada las 18.30 hubo un enfrentamiento con armas de fuego entre hinchas de Juventud y Central en la zona del ex-Matadero Municipal.   

Fuente: El Tribuno

Lunes 17 de septiembre de 2012, 23:35