Boca Unidos 0 Instituto 1

Instituto venció a Boca Unidos que careció de eficacia en la ofensiva

Aunque hubo tuvo una ligera mejoría no logró prosperar en ataque y la “gloria cordobesa supo aprovechar una de las pocas situaciones de gol que generó para anotar el gol del triunfo, a pesar de jugar con diez por la expulsión de Bauman a los 34 del primer tiempo.

No hay con qué darle cuando la mano viene cambiada. Y Boca Unidos es testigo de cómo con el transcurrir de los encuentros se torna difícil, no puede salir del pozo y su mala racha va en aumento, sin que afloren signos capaces de cortar esta serie de derrotas.

Ayer, en un partido de la 24ª fecha del torneo de la Primera B Nacional jugado en nuestra ciudad, Instituto de Córdoba le ganó 1 a 0 con gol de Christian Bernardi faltando 19 minutos, provocándole la cuarta derrota al hilo que bajaron las acciones que el “aurirrojo” tenía en la tabla de posiciones, que ahora empieza transitar de mitad para abajo. Es más, el traspié llevo a la dirigencia a dar por finalizado el interinato de Roberto Saucedo (ver aparte) y a gestionar un nuevo DT para hacerse cargo del plantel después del partido del domingo contra Santamarina en Tandil.

Los resultados mandan y las seis derrotas en los últimos ocho encuentros influyeron para la caída del técnico, aun cuando ayer Boca Unidos mejoró en relación a lo que venía exhibiendo. Eso sí, continuó siendo alarmante la escasa eficacia o poder ofensivo del equipo porque no supo concretar las tres o cuatro oportunidades, un cabezazo del ingresado Marcelo Miranda que rebotó en el poste inclusive.

Dentro de ese panorama se jugó un partido en el que Boca Unidos fue algo más en el primer tiempo. Con buena circulación de la pelota y apostando a varias alternativas para arrimar peligro ante el arco del seguro Lucas Hoyos. El arquero empezó a trabajar temprano conteniendo un remate bajo de Martín Fabro. A los 15 una buena triangulación ofensiva lo resolvió el mismo Fabro y volvió a atajar abajo el arquero de la “gloria”, que de nuevo se opuso a otro remate del ex Independiente, luego de una buena acción de Nicolás Silva, ayer el delantero que más preocupó a Instituto.

El local tuvo más la pelota y, aunque muchas veces se repitió lateralizando el juego sin meter pases verticales que lastimen, impidió manejar el balón al conjunto visitante, que tenía en Bernardi y Maxi Correa a sus mejores exponentes. Un remate de Bravo que se perdió ancho sobre el poste derecho fue otra aproximación de Boca Unidos, que a los 42’ generó un buen desborde de Pablo Vergara que Silva a espaldas de todos no le pudo pegar bien y el balón salió desviado. ¿Instituto?, hizo poco y nada, salvo una buena triangulación a los 28’ Machín metió el pase vertical para Bauman pero salió prestamente Sessa achicando el remate y salvando a su valla.

Poco antes Bauman había entrado peligrosamente a Ricardone cuando este barrió abajo y Nicolás Lamolina, en la quizás una de las pocas fallas, lo expulsó cuando bien podía haberle mostrado la tarjeta amarilla nada más.

Se pensó que con uno menos el rival Boca Unidos iba a sacar un defensor y poner otro delantero para tener más “peso” en la ofensiva, pero todo continuó igual después de un tiro de afuera de Gotti que Sessa rechazó esforzándose. Hubo sí un centro de Vergara que “peinó” Fabro y contuvo sin problemas Hoyos y un doble enganche de Silva en el área remató bajo pero Hoyos atajó sin problemas. Fue a los 15’ y dos antes había entrado Emiliano Endrizi como volante izquierdo, se retiró Yllanes y Machín bajo a desempeñarse como lateral derecho.

Con eso Instituto mantuvo equilibrado el equipo y no se notó la diferencia numérica, porque el juego pasó a ser más parejo. Dentro de ese panorama llegó el minuto 26 de la etapa final, momento en que tomó la pelota sobre la derecha Bernardi, encaró con velocidad y tiró la pared con Correa, la devolución le llegó justa y entrando a la carrera cruzó el tiro bajo, el balón dio en el poste y se metió detrás de Sessa.

Fue gol de Instituto que cayó como agua helada sobre la gente de Boca Unidos porque faltaba nada más que veinte minutos y el equipo estaba perdiendo. Enseguida salió Oviedo y entró Ignacio Valsangiacomo buscando Roberto Saucedo darle más potencia al ataque, mientras Instituto se agrupó bien atrás e intentó sorprender de contra.

El reloj indicaba 29’ cuando Escobar “picó” el pase para la diagonal de Silva, quien de primera la cruzó al punto del penal y surgió Rodríguez despejando con fuerza, anticipando a Dening y Valsangiacomo. A los 34’ Bernardi ejecutó un tiro libre de media distancia exigiendo a Sessa, quien volvió a lucirse conjurando una entrada de Pablo Soda que había entrado poco antes en la “gloria”.

Así llegaron los instantes cercanos al epílogo y como si fuera “cosa de Mandinga”, tras una corrida y centro de Vergara alcanzó a desviar levemente Dening en el aire y sorprendió a Marcelo Miranda que llegó a cabecear pero el balón rebotó en el poste, fue hacia el punto del penal y rechazó con todo Rodríguez despejando el peligro.

Después, entre los avances desesperados de uno y la firme defensa del otro, el árbitro lanzó el silbato final ante la alegría de todo Instituto, que se hizo un racimo en el centro del campo de juego, ante la resignación e impotencia de Boca Unidos, que volvió a perder provocando la salida de Roberto Saucedo y sin poder cortar la serie negativa que alcanzó su cuarta derrota en serie.

Fuente: foto y texto: http://diarioepoca.com

Jueves 09 de julio de 2015, 09:57