All Boys 1 - Chacarita 0

All Blanco

Ricky Blanco se descargó de la apretada de la barra con un golazo para el 1-0 del Albo ante un tibio Chacarita.
 

Después de caer en los clásicos ante Chicago (0-1) y Argentinos (0-3), la bronca de los hinchas había estallado en Floresta. Abucheos, peleas internas en el entretiempo, rumores de renuncia de José Romero y apriete de barras a Ricardo Blanco. Tras todo ese cóctel explosivo, All Boys reaccionó y dio un paso al frente en la victoria en Córdoba contra Instituto. Y terminó de cambiar la pobre imagen que tenía hace 10 días con el gran triunfo vs. Chaca. Así es el fútbol. Ahora el Albo quedó a tiro del puntero Dálmine.

Con carácter, el local demostró que quiere alejarse de la zona roja y empezar a mirar la otra tabla. La misma reacción es la que le está faltando al Funebrero, que desde hace varias fechas entró en un pozo futbolístico y no puede salir. Pese a intentar llevar adelante la idea que pregona desde la llegada de Walter Coyette, nunca pudo encontrar la manera de plasmarla en el terreno de juego. Encima, Pepe delineó un partido con una presión alta, apuntando al error de una defensa que no estuvo fina y pasó varios sobresaltos. Pero el buen PT de All Boys no se pudo cristalizar en el marcador (pasó cerca un remate del Mudo Vázquez y Vega no logró empujarla abajo del arco).

La solución llegó en el complemento con el ingresó de Blanco. El 17 dejó la desgracia de lado y con hambre de gloria se puso el equipo al hombro. Atrás quedó el “se pudre todo” que le dijeron los ocho barras que lo apuraron tras la caída contra el Bicho. Es que tomó la pelota en mitad de cancha, dejó en el camino a Menéndez, Mellado y Juan Cruz González y sacó un bombazo imposible de atajar: 1-0 y a dos unidades de la punta. All Blanco, señores.

DIARIO OLE

Domingo 23 de octubre de 2016, 11:33