All Boys 3 - Crucero del Norte 2
Agónica derrota de Crucero del Norte ante All Boys en Floresta
Era un partido ganable. Incluso para este Crucero que tanto sufre cada vez que sale de Misiones. Pero un error defensivo en el amanecer del partido, un corte defectuoso de Arce tras un centro intrascendente, la inentendible expulsión de Sotelo y la indecisión para marcar en el cierre del partido terminaron costando demasiado caro.
En un atípico encuentro disputado en Floresta, válido por la 13ª fecha de la B Nacional, Crucero cayó anoche agónicamente 3-2 ante All Boys y continúa sin ganar como visitante.
Apenas se cumplían 8’ de juego cuando Nicolás Castro se excedió a la hora de sacarse rivales de encima cerca del área propia, la perdió ante Milano en zona prohibida y el ex Huracán definió de primera ante un Nacho Arce que nunca se esperaba un desenlace tan fatídico de la jugada.
El mérito que tuvo el Colectivero fue asimilar el golpe. Porque rápidamente se acomodó en el verde césped del Islas Malvinas y a partir del desequilibrio individual de Abel Méndez inclinó la cancha a su favor. El tucumano confirmó que viene siendo la principal carta ofensiva del equipo y anoche estuvo intratable para el fondo local.
Un par de minutos después del gol, el propio Méndez dejó pagando a Ponce por el sector izquierdo del ataque y cara a cara con Losa definió exageradamente mal.
Pero no fue lo único que hizo el conjunto misionero. Porque enseguida se hizo patrón del juego y lastimó una y otra vez cada vez que se la tiraron al 10.
A los 25’ Pablo Ostrowski tuvo el empate y también Imanol Iriberri (Stupiski sintió una molestia en la previa y fue al banco), y más tarde, en una inverosímil triple chance de gol, Losa le ahogó el grito a Castro en la boca del área, el travesaño le negó su oportunidad a Domínguez y finalmente el uno volvió a vestirse de héroe ante un potente bombazo de Vera de afuera del área.
La defensa del Albo tuvo una noche para el olvido y si Crucero no podía festejar era sólo por mérito propio.
El medio que dispuso Salinas ante la ausencia de Vera Piris no permitió ver la mejor versión de Domínguez ni de Ostrowski, incluso de Castro –más allá del error en el gol-, que no fue la manija que supo ser en partidos anteriores. Pero así y todo Crucero dominó el pleito. Siempre a partir de la velocidad de Méndez.
Rodrigo Lechner también dejó escapar el 1-1 al conectar muy débil un pase en la boca del arco, pero el premio llegó sobre el cierre del primer tiempo, cuando Castro ejecutó con precisión una pelota parada y Delio Ojeda anticipó a una estática defensa para establecer la merecida paridad. Nada mejor para diagramar lo que estaba por venir.
Pero vino lo peor. A los 7’ del complemento, Ponce –el mismo que tanto padeció a Méndez en el primer tiempo- encaró dos veces a Sotelo en posición ofensiva y mandó el centro al segundo palo, Arce no tuvo la mejor respuesta en el rechazo y Cristian Canuhé le dio de primera para marcar un verdadero golazo de afuera del área y propinar otro cachetazo prematuro a las ilusiones.
La esperanza se renovó a los 9’, cuando Ponce vio la segunda amarilla y dejó al Albo en inferioridad numérica.
Quién si no Méndez le dio forma al nuevo empate visitante. A los 22’ fabricó una buena pared con Iriberri, mandó el centro bajo al punto penal y el recientemente ingresado Robinho Dujaut, libre de marcas, facturó en la primera que tuvo.
Quedaban 20’ y las obligaciones estaban del lado misionero. Hasta que Sotelo también se hizo expulsar y todo quedó igualado.
Con el ingreso del zurdo defensor Gilberto Benítez por Iriberri Salinas dejó en claro su idea, All Boys arriesgó mucho más en los últimos minutos y tuvo un exagerado premio en la última del partido, cuando Vega ganó en velocidad, metió el centro pasado y Hernán Rivero no perdonó en la boca del arco.
De los errores se aprende. Y es hora de aprender.
Por Gustavo Hollmann http://www.elterritorio.com.ar/
Martes 08 de noviembre de 2016, 10:44