Rosario Central 1 - 0 Cañuelas FC
A Central le alcanzó con muy poco para vencer a Cañuelas y avanzar en la Copa Argentina
Con un tanto del mediocampista Mauricio Martínez, el conjunto canalla se clasificó a los 16avos del torneo.
Central pasó de fase. Se metió en los 16avos. de final de la Copa Argentina tras vencer a Cañuelas por 1-0 en el estadio de Unión. Cumplió su objetivo. Avanzó un casillero. Pero quedó en deuda por el nivel que mostró, ya le costó más de la cuenta imponerse a un rival que está varias categorías por debajo. La diferencia de jerarquía que se esperaba ver entre un equipo de primera división y uno de Primera C no existió.
La mayor diferencia entre el canalla y su rival de turno fue el gol que marcó el mediocampista Mauricio Martínez a los 11 minutos del primer tiempo. En líneas generales el equipo de Paolo Montero se fue en insinuaciones. Mostró su juego a cuentagotas. Y se mostró muy impreciso a la hora de jugar las jugadas de peligro.
En el arranque el canalla mandó señales positiva. Se adueñó de la pelota, presionó alto y llegó con peligro. Y a los 11' inclinó la balanza a su favor con un golazo desde afuera del área del volante Mauricio Martínez. Pero luego la imagen del canalla se desdibujó.
Ya no le imprimió tanto ritmo al juego. Le costó demasiado hacer sentir la diferencia de categoría con su rival.
Igualmente generó chances de gol. Las más claras de la primera mitad estuvieron en los pies del mediocampista Maximiliano Lovera y el delantero Teófilo Gutiérrez, pero ninguno pudo quebrar la resistencia del arquero Cristian Moyano.
Con la ventaja en el bolsillo, el canalla ganó en tranquilidad y seguridad. Sin embrago, no alteró su repertorio. Continuó yendo para adelante y generó un par de situaciones claras de gol, aunque sin demasiada claridad. Teo Gutíerrez y Lovera tuvieron en sus pies las situaciones más claras, pero no estuvieron finos en la definición.
El panorama era alentador para el canalla. Era más que su rival y legaba con peligro. Pero con el correr de los minutos se desdibujó y perdió el control del juego. Tal fue el cambio del trámite que el Tambero encendió luces de alama en el arco de Jeremías Ledesma sobre el cierre del primer tiempo en dos oportunidades. Primero por virtud propia, y luego por un importante error del fondo auriazul.
El inicio del complemento entregó las mismas señales que gran parte de la primera mitad. Si bien Central no lucía y le costaba generar juego, estaba claro que si hilvanaba una par de aciertos podría aumentar la ventaja.
A los 30' el equipo de Montero tuvo la más clara. Bordagay tuvo su chance en el corazón del área chica, pero perdió en el duelo con Moyano, y Martínez remató tras recoger el rebote pero tampoco pudo con el uno del Tambero.
Después no hubo tiempo para mucho más. Central siguió intentando. Con más amor propio que ideas y juego. Pero Cañuelas también respondió. Salió a quemar las naves y se arrimó al área de Ledesma, aunque sin peligro cierto.
Así se diluyó el partido. Con un Central deslucido y con la ventaja en el bolsillo, y con un Cañuelas que quiso pero que no pudo ni supo encontrarle la vuelta a un rival de mayor jerarquía que inclinó la balanza a su favor con muy poco.
FUENTE: DIARIO LA CAPITAL.
FOTO: DIARIO LA CAPITAL.
Miércoles 26 de abril de 2017, 00:55
