Douglas Haig 1 Dep. Merlo 2

Un Mazzazo

La descollante actuación de Pablo-con gol incluido-, no alcanza para explicar cómo a Douglas se le escapó un triunfo casi sellado ante Deportivo Merlo. El “Charro” lo dio vuelta con uno menos-roja a Díaz-a los 42´ y 47´ del último capítulo mediante Piris y Lázzaro, y se llevó de Pergamino una victoria tan increíble como inexplicable. El rojinegro fue muy superior a su rival, generó situaciones claras, pero se quedó sin nada. El público, que llenó el Morales, se fue atónito por el cotejo que se escurrió en el cierre. Caballuci y Barreto dejaron la cancha en el primer tiempo por sendas lesiones.

La resonante victoria ante Rosario Central en el Gigante de Arroyito de siete días atrás quedó a un costado este domingo, porque Douglas salió a afrontar el compromiso frente a Deportivo Merlo con la finalidad de reafirmar aquél semejante logro.

A pesar de esto, la realidad fue otra. O el resultado. Porque el rojinegro hizo todo bien durante 87 minutos, pero dos descuidos le demostraron que el fútbol es tan justo como impredecible, ya que el “Charro”, conjunto limitado si los hay, que no generó situaciones más allá de los goles, se llevó de Pergamino un premio exagerado.

De arranque fue el team de Omar Jorge el que salió a tomar el papel protagónico del match. Así, con la presión ejercida por el pac-man Levato y Barreto, más las agresividad de los costados de Mazza-la figura-  y Caballuci, el dueño de casa acorraló desde el vamos a su adversario.

La primera llegada fue a los 3´ justamente del ex River, que se metió al área y sacó un disparo que Giordano-el mejor de su equipo- la salvó en la línea. Y a los 7´, con idénticos actores, otra vez el uno visitante se lo birló, aunque en esta oportunidad la envió al tiro de esquina. De esa acción, Aranda cabeceó y el balón fue a las manos del portero.

Lo del elenco de Ferraresi fue tibio. Arribó al norte bonaerense con la sola premisa de aguantar para llevarse algo. Pero su libreto quedó sujeto a correr siempre detrás de la pelota y ensuciar permanentemente el juego con violencia.

Desde lo futbolístico, los del conurbano presentaron un mediocampo central con players de similares características, tales los casos de Lorefice y Matías Díaz, corredores, metedores, aunque con falencias para distribuir. A sus costados, Pajón se mostró más incisivo y fue el único que buscó asociarse con Lázzaro-siempre se movió de espaldas y exigió- y con un inexpresivo Altamarino, mientras que en el sector izquierdo Menéndez se preocupó más por marcar a Mazza que a crear.

De esta forma, el “Milan de Pergamino” impuso su juego en cierto punto. Es que si bien  controló a su rival, el encuentro se vio modificado desde dos cambios obligados. Primero fue Caballuci, con un golpe intercostal, el que debió dejar la cancha por Aguirre, y más tarde Barreto, con un esguince de tobillo, que dejó su lugar a Falcón.

A partir de allí, con Mazza en la izquierda y el de Victoria del otro sector, el ataque de los locales sufrió retoques que influyeron, ya que el recién ingresado, con tendencia a ser enganche e ir para el medio, se juntó con asiduidad con el “bibi” González y permitió así el pasaje permanente de Marcolongo por detrás suyo. Y fue éste quien contó con la última ocasión de ese capítulo, cuando a los 36´ disparó, la sacaron en la línea y en el rebote Mazza la tiró por arriba del horizontal.

El segundo acto arrancó como una copia fiel del inicial. Douglas siguió con su idea de buscar el arco enemigo con la mayor cantidad de jugadores posibles pisando el área. Un claro ejemplo de ello, fue la de Diego Levato, que sobre los 4´ remató desde afuera y Giordano la mandó al córner.

No obstante, el primer tanto no tardó en llegar. Mazza recibió de espaldas a los 11´ dentro del área, y cuando pudo girar, le dio de derecha contra el caño zurdo de ex arquero de Desamparados y puso al fin justicia en el marcador.

El partido ingresó en un pozo. El rojinegro empezó a hacer control del balón y moverlo de un lado al otro, y más aún cuando a los 15´ Matías Díaz vio la segunda tarjeta amarilla y posterior roja de parte Yamil Possi por una fuerte falta a Marcolongo.

Si para Merlo fue difícil agarrar el esférico y generar peligro a la defensa local, con uno menos fue misión imposible. A pesar de que “Coqui” Ferraresi intentó la heroica mandando a Rivas y a Piris en lugar de Menéndez y Altamarino, el trámite fue siempre controlado por los de Jorge.

Promediando esa etapa, comenzó a crecer todavía más la figura de Pablo Mazza, quien además fue ovacionado por todo el estadio por su entrega, tanto en ataque como en la faz defensiva, cuando dio una mano importante en la recuperación.

Alba suplió a Gabriel González, que efectuó un desgaste interesante atacando por las dos puntas, y el “Kiosquero”, en una de sus primeras intervenciones, sacó un remate a colocar a los 33´ desde la izquierda con destino de ángulo, pero Giordano la envió al tiro de esquina.

En ese instante, Douglas pecó de ambicioso. Sin poder aumentar la diferencia ante un oponente débil, que no exigió y además con un jugador menos, optó por continuar en la búsqueda del segundo y no de cerrar la historia, y así le dejó espacios y vida al “Charro”, que en los últimos instantes tuvo a Blanco Leschuck también en cancha.

A los 42´, y sin haber inquietado nunca hasta Álvarez-no patearon un solo córner-, los de la banda azul llegaron al milagro. El rojinegro se equivocó en la salida y Piris tomó un balón antes de entrar al área y tras varios amagues con gambetas incluidas, el ex Vélez quedó mano a mano con el arquero de Villa María y definió fuerte de zurda para poner el 1 a 1.

Esos minutos fueron de desesperación en los pergaminenses, que fueron a buscarlo tocados en su orgullo. Con empuje y corazón casi logra, porque Diego Levato recibió en la izquierda y sacó un tiro que se fue cerca del ángulo.

No terminó ahí la canción. Otro contragolpe letal que condujeron a la perfección Blanco Leschuck y el autor del empate, quien abrió para que Ferro mande un centro rasante al punto del penal, el cual halló la presencia de Lázzaro, que la tocó a la red para estampar el 2 a 1 a los 47´.

Increíble pero fue la cruel realidad. Douglas no lo definió a tiempo a pesar de tener numerosas ocasiones, y lo pagó carísimo. Lo peor es que Merlo se llevó un premio que puede ser vital al final del campeonato.

La gente se fue anonadada, sorprendida, pasmada, por lo que se vivió en esos minutos fatídicos en los cuales se escaparon tres unidades de manera asombrosa. A pesar de todo, los simpatizantes le dieron su apoyo al plantel en la salida porque el próximo fin de semana habrá revancha, y nada menos que con Sarmiento de Junín.

Síntesis:

Douglas: Álvarez; Marcolongo, Gioda, D. González, Achucarro; Mazza, Levato, Barreto, Caballuci; G. González y Aranda. DT: Omar Jorge. Suplentes: Dituro, Soto, Ponce y Rovira.

Deportivo Merlo: Giordano; Ferro, Mena, Pfund, Torres; Pajón, Lorefice, Díaz, Menéndez; Altamarino y Lázzaro. DT: Néstor Ferraresi. Suplentes: Tantoni, Cepeda, García y Gironi.

Cambios: Aguirre, Falcón y Alba, por Caballuci, Barreto y G. González (DH). Rivas, Piris y Blanco Leschuck, por Menéndez, Altamirano y Ferro (DM).

Amonestados: Menéndez (DM).

Expulsado: ST 15´ Díaz (DM).

Goles: ST 11´ Mazza (DH), 42´ Piris (DM) y 47´ Lázzaro (DM).

Árbitro: Yamil Possi, de Avellaneda.

Cancha: Miguel Morales.

Agradecimientos: Hugo y Judi Marina.

LA GLORIA O DEVOTO

Lunes 29 de octubre de 2012, 08:10