Un marco imponente, el asado rutero y el corazón de Trapito
Unos 4000 hinchas se ubicaron en una de las cabeceras y, aunque el resultado fue impiadoso, no dejaron de cantar ni alentar en ningún momento.
A la hora de empezar el partido, la Fortaleza Granate lucía un marco imponente. El estadio estuvo colmado en los sectores habilitados (sólo quedó un pulmón en la mitad del sector popular destinado a los hinchas de Alvarado que no se abrió al público).
La gente de Mar del Plata acompañó al conjunto de Mauricio Giganti de manera espectacular. Había que viajar 400 kilómetros, en un día laborable y en una época del mes en la que el dinero no sobra (más bien falta). Unos 4000 hinchas se ubicaron en una de las cabeceras y, aunque el resultado fue impiadoso, no dejaron de cantar ni alentar en ningún momento.
Hermosa la camiseta que presentó Alvarado, especialmente diseñada para esta única ocasión. Con el fondo blanco y la franja diagonal azul, descendente de izquierda a derecha en el frente y en el dorso, y los hombros también en azul, acompañada por pantalones azules y medias blancas. Uniforme de gala para los de Matadero.
Durante el viaje de ida, a pleno sol, fue una constante ver a numerosos hinchas de Alvarado disfrutando del tradicional asado. En Dolores, en Castelli y también en otras localidades, en parques, descanso o directamente, a la vera de la Autovía 2, las parrillas y las brasas estuvieron a la orden del día.
Sin dudas, parte de un súper plan para compartir en familia o con amigos, que se prolongó un rato más tarde en una de las cabeceras del estadio “Ciudad de Lanús”, donde se ubicaron los simpatizantes llegados desde Mar del Plata.
Apenas comenzaron a instalarse ambas parcialidades, comenzó el folclórico duelo de hinchadas. Esos “ida y vuelta” que cada vez hacen replantear con más énfasis nuestra incapacidad como sociedad para lograr que puedan volver los visitantes a las canchas.
Impecable presentación del estadio, el campo de juego, la iluminación, las instalaciones y accesos. A tono con uno de los clubes más ordenados de la Superliga, que respondió con creces a una tarde-noche muy especial. Eso sí, como suele suceder en casi todos lados, la señal de wifi no funcionó. Dicen los que cubren seguido partidos en la cancha de Lanús que se trata de algo habitual. En todos lados se cuecen habas.
Exactamente treinta y cinco minutos antes de la hora pautada para el inicio del encuentro, aparecieron en escena los dos arqueros de Alvarado, Matías Quinteros y Matías Degrá, para intensificar la entrada en calor. Fueron recibidos con entusiasmo por el grupo de hinchas que llegó desde de Mar del Plata, y ambos saludaron a la parcialidad del “Torito”.
Un par de minutos después, el rito se repitió del otro lado, con el ingreso al campo de juego de los dos goleros de Boca, Agustín Rossi y, todavía, Guillermo Sara, ya que pese a que se había deslizado la posibilidad de que fuera al banco el recién llegado Esteban Andrada, finalmente fue como suplente el ex Atlético Rafaela.
Cuando por los altavoces del estadio se anunciaron las formaciones de ambos equipos, la gente de Alvarado respaldó por igual a sus jugadores. En cambio, desde la otra cabecera, los “xeneizes” mostraron su preferencia por Wilmar Barrios y Cristian Pavón, y también ovacionaron a Carlos Tevez, al ser nombrado entre los suplentes.
Y “Trapito” se dio el gusto. Ya retirado de la actividad e incorporado al cuerpo técnico de Giganti, Ezequiel Ceballos jugó anoche sus últimos diez minutos como futbolista profesional. Entró y, como lo hizo durante toda su carrera, las pidió todas. Corrió y corrió. Disfrutó como pudo de ese ratito.
Fue, además, el último jugador en desparecer por el túnel, luego de haber ido caminando lentamente hasta donde estaba su gente, para ofrendarle el corazón al pueblo de Matadero. Tiró besos con la mano y recibió un afecto incondicional
Boca jugará en la próxima instancia, dieciseisavos de final, ante San Martín de Tucumán. Al ganador de esa llave ya lo espera en octavos de final Gimnasia y Esgrima La Plata.
FUENTE: DIARIO LA CAPITAL DE MAR DEL PLATA.
FOTO: DIARIO LA CAPITAL DE MAR DEL PLATA.
Jueves 02 de agosto de 2018, 14:33
Antes de hablar pelotudeces en las peñas hay que abrir los ojos y pensar un poco