Atl. Trinidad 1 Sp. Peñarol 0
El León, en casa, rompió la racha
Trinidad, con gol de Lucas Cortéz, venció a Peñarol y consiguió el primer triunfo de local. El partido careció de buen fútbol.
Las rachas están hechas para romperlas. Eso lo entendió a la perfección Trinidad que anoche venció por la mínima diferencia a Peñarol en el único que encuentro que abrió la 9na fecha de la zona del Argentino B. Y el triunfo significó mucho para el León porque fue el primero de local. El León había logrado sólo dos triunfos en el torneo y ambos habían sido en calidad de visitante. Anoche supo hacerle frente a un juego por demás deslucido y salió vencedor.
El primer tiempo estuvo de más. Un partido difícil de explicar. Los primeros cuarenta y cinco minutos pasaron sin pena ni gloria. Casi no hubo situaciones claras que llevaron peligro a los arcos de Criado y Sambor. En ese trámite parejo, fue Trinidad el que intentó un poco más pero no tuvo claridad como para llegar a la conversión. Recién a los 37 llegó la más clara para el local, Gordillo ganó en el mediocampo y con un remate cruzado habilitó a Villegas (el defensor estuvo abocado al ataque), el “9” la bajó de pecho pero cuando remató, su tiro se fue desviado. Al minuto, Galán se encontró con el balón en la puerta del área pero el delantero bohemio definió desviado. En ese lapso del partido, se vio lo más claro de la primera parte. El complemento no cambió mucho. Ambos equipos salieron con el mismo planteo y fue difícil encontrarle la vuelta al encuentro. A los 18, fue Trinidad el que tuvo la chance por segunda vez en el encuentro. Y otra vez fue Villegas el que la desaprovechó. Sambor salió mal para cortar el centro de Cortéz, el rebote le quedó a Villegas que sin querer, le pegó en el cuerpo y salió desviado. Con los minutos, tanto Bravo como Pagés, intentaron con variantes cambiar el ritmo de juego. En el local el ingreso de Carballo fue el que más frutos dio. El ex Villa Obrera encaró por el sector izquierdo, Ibaceta se durmió y por detrás apareció Lucas Cortéz que con un zurdazo tremendo la mandó a guardar al fondo de la red de Sambor y rompió el maleficio del Barrio Atlético. El gol fue motivo para que el Bohemio reaccionara. Con Ríos adentro, el Bohemio trató de ser más ofensivo. Pero no lo logró. A los 49 tuvo su chance: Balmaceda ejecutó un tiro libre, parecía que se metía pero terminó tapando con lo justo Criado. Trinidad terminó aguantando como pudo y así consiguió el triunfo que tanto necesitaba.
DIARIO DE CUYO
Sábado 10 de noviembre de 2012, 08:58