Unión y Juventud de Bandera, Santiago del Estero al TDI 2013

El Agustín Cadenas de Quimilí fue el escenario que arrojó el “campeón anual” de la Liga de Añatuya; por la Zona A Unión y Juventud de Bandera, por la Zona B Juventud Unida de Quimilí. Fue un certero triunfo de la visita por 2-0 con goles de Flamenco y Barraza ambos en el primer tiempo. En Bandera también había sido triunfo pero 2-1.

Un domingo templado invitaba al gran choque, si bien el estadio estuvo repleto no presentó el marco festivo que se observó en los encuentros que “La Juve” disputó frente a Quimili Central por la semi-final de la Zona B y Boca de Tintina en la final.

El comienzo de las acciones marcó lo propio en el campo de juego, con un local consciente que debía revertir los papeles pero con un dejo de desgano.

La zaga central se mostraba imprecisa y un desencuentro entre Huidobro y Morán casi en un blooper abren el marcador para la visita; el primer central no escuchó el grito de su arquero y se la peinó para el lado opuesto, un esfuerzo del 1 evitó el gol. Solo era en un aviso de lo que vendría instantes después.

Se jugaban 10 minutos, un tiro libre al corazón del área encontró al “pájaro” Rojas sin marca (gracias a una defensa que tiró pésimo el offside), este remató al cuerpo de Morán pero en el rebote Flamenco arremetió solo con un arco desguarnecido, 1-0.

El partido siguió apagado, con Juventud sin ideas y un Unión que esperaba calmo algún error de su rival para liquidarlo, algo que sucedería sobre el final de la primera parte.

Antes de ello, Villafañe (lateral derecho de Bandera) vio la tarjeta roja por doble amarilla, la primera por demorar el juego y la segunda ante una protesta desairada, se jugaban 40 minutos.

Cuando los de Ruiz presumieron agrandarse ante la superioridad numérica, cayó el balde de agua helada que enmudeció el estadio. Delgado intentó un taco en la mitad del campo, Gorosito recuperó sin problemas el balón que metió en cortada para el ingreso de Barraza por el costado derecho; un remate cruzado sin ninguna peligrosidad se le escurrió entre las manos y las piernas a Morán. Mazazo, 2-0.

El complemento estuvo de más, los cambios en Juventud no dieron resultado y solo estuvo cerca del descuento por errores del rival, no por creaciones propias. Por su parte Unión se dedicó a cuidar el marcador y pudo haberlo ampliado si hubiese estado mas fino en la contra.

“La Juve” no fue ni la sombra del elenco que desplegó un fútbol que ilusionó a Quimili. La explicación? Su juego a lo largo de la temporada se basó en una columna vertebral de nombres propios que esta vez fallaron casi todos: Morán (que hoy además del gol, se mostró inseguro en cada pelota que llegó a su arco), la zaga central Ramírez (el mejor defensor del campeonato, hoy ingresó con los botines cambiados), Huidobro (el único que salvo la ropa), Delgado (el batallador de la mitad del campo, hoy perdió en todos los cruces), Arias (expulsado en el partido de ida) y “Ñaño” Pereyra (ausente por motivos personales).

Unión y Juventud de Bandera concluyó invicto el año y en la final con un juego ordenado se proclamó campeón sin atenuantes en contra.

Tras la victoria, con el equipo festejando junto a un gran número de hinchas que lo acompañó, el técnico de Bandera, Balizan expresaba su emoción: “Una alegría inmensa con el aliciente que salimos invictos a lo largo del año. Sabíamos que no sería un partido sencillo porque en el partido de ida después de jugar un gran primer tiempo, en el complemento nos habíamos visto superados por Juventud; por eso vinimos con la ilusión que si teníamos la regularidad que mostramos a lo largo del año se podía ganar, gracias a Dios se dio así”.

Con respecto al juego explicó que plantearon un partido para jugarlo de contra, conociendo la ventaja que trajeron de un gol y más aun cuando llegaron a convertir en los primeros minutos. Por otro lado debieron apelar a jugadores jóvenes dado las suspensiones que acarreaban muchos de los habituales titulares.

Fue de gran mérito lo conseguido por Unión en consecuencia que algunos equipos de su Zona debieron retirarse por problemas económicos e institucionales lo que dejo a las claras el esfuerzo que se requiere mantenerse en una competencia de este nivel, Belizán lo destacó también: “Unión es una gran institución del interior de la provincia, en las diferentes disciplinas deportivas siempre está en el tope y el fútbol no podía ser la excepción. Este año se armó un gran grupo con muchachos del pueblo y con dedicación y sacrificio salimos adelante. El objetivo ahora es jugar el TDI con chicos de Bandera con un poco más de preparación física y seguramente haremos un buen papel”.

Para despedirse, con lágrimas en sus pupilas concluyó “yo tengo un caso muy particular, tengo un hijo que me está mirando desde el cielo y se lo dedicó a él”.

Especial para Somos Deporte: Pablo Abelleira

Lunes 26 de noviembre de 2012, 18:55