Olimpo (BB) 0 - 1 Sol de Mayo (Viedma)

Esta vez no salió el “Sol” y Guille no brilló: Olimpo perdió de local después de 9 partidos y 8 meses

Cayó 1-0 frente al representante de Viedma, que justificó la victoria jugando con un hombre de más casi todo el segundo tiempo. El gol llegó por un error del arquero Guido Villar. Ahora es de 7 puntos la diferencia con su escolta de la Zona Sur, el sorprendente Sansinena.

Me siento en mi casa a analizar el partido y me doy cuenta que por donde empiece o desde el punto de vista que sea voy a llegar a la misma conclusión: ¿qué impacta más, la derrota del  líder de la Zona Sur del Federal A o que Olimpo haya vuelto a perder de local después de 9 encuentros y poquito más de ocho meses?
Ambas, porque todo lo que gira alrededor del mundo aurinegro repercute con más ruido, así esté primero, en mitad de tabla o peleando abajo como tantas veces lo tuvo que hacer en su peregrinaje por el fútbol de AFA de Primera división.
Al menos en este torneo, donde en el Carminatti te suele pasar por la fiambrera, a Olimpo nunca lo había tan incómodo como hoy, superado estratégicamente por Sol de Mayo, un equipo hombruno, práctico, prolijo y que nunca entró en pánico, que le ganó 1-0 por un yerro de Guido Villar (no contuvo un pelota envenenada, que rebotó en Diego Galván para que le quede servida en la boca del arco a Maxi Osurak), ventaja que terminó justificando con un hombre de más durante 43 minutos (37 más los 6 de descuento) de ese segundo tiempo.
Lo primero que hay que aclarar es que el conjunto viedmense, con jugadores visiblemente excedidos de peso, vino predispuesto a luchar y que al dueño de casa le costó encontrar a Brian Guille, muchas veces recostado sobre el lado donde no hubo acción pero casi siempre bien marcado en zona por un 4-1-3-2 solidario y con las mañas bien marcadas de una categoría donde si no abollás te abollan.
La otro que tengo para decir no se me puede olvidar: mayormente la pelota fue de Sol y el local corrió como muy pocas veces lo hizo en cotejos anteriores. No estuvo perdido ni aturdido, pero si se sintió raro.
Los pases filtrados no salieron y los pelotazos largos terminaron en la tranquilidad de la última línea visitante. Es más, hasta le costó darle forma a algún envío de pelota parada, que llegaron a destino, pero por virtudes del adversario, Capraro, Ferreyra y Perotti, en distintos momentos, no puedieron cabecear acomodados y con la dirección deseada.
Esta vez no hubo juego asociado, ni sorpresa, y menos que menos la magia habitual del 10, que solo tuvo una chance, a los 33 del segmento inicial, cuando gambeteó al arquero pero se quedó sin ángulo para definir.
Inclusive en esa etapa, a los 20, Guido Villar fue a descolgar un centro proveniente desde la izquierda, la bola se le escurrió de sus manos y Malacarne envió la redonda a la red. Gol lícito que el impresentable árbitro Alvaro Carranza (permitió el juego brusco a todo nivel, incluso, entre las que me acuerdo, dejó sin sanción un patadón de atrás de Matías García sobre Amarilla y le dio vía libre a Juan Aguirre, aún amonestado, para que reparta murras a lo largo y a lo ancho del césped del Carminatti).
Eso sí, acertó en la doble amonestación y la expulsión de Sebastián Fernández (vio la amarilla a los 2 del complemento y a los 8 barrió de atrás a Diego Galván y se tuvo que ir sin reprochar absolutamente nada) y en anular el gol de Luis Vila (su primer cabezazo dio en el horizontal y en el segundo la mandó a guardar), a instancias del asistente Mariano González, por posición adelantada del “Tanque” y también de Abel Méndez, quien intentó participar en la jugada (la foto es muy clara).
Con uno menos, Olimpo arriesgó con un 4-3-2, después con un 3-4-2 y al final con Ferreyra de 9, pero con el alma no alcanzó. Su ímpetu por empatar lo dejó desnudo atrás, pero a este Olimpo, vigorizado por el presente y anímicamente inquebrantable, no le importa y no le importará jamás perder por uno, dos o los goles que sean de diferencia. Este equipo está preparado para ganar siempre y su grandeza así lo demuestra: la victoria o la vergüenza deportiva a cualquier precio.
Sol de Mayo es el único elenco del Federal A que le ganó dos veces seguidas a Olimpo en el Carminatti: 3-0 en la edición pasada y 1-0 hoy. Más que “Sol” es un sombra, aunque esta vez los dirigidos por Carlos Mayor estuvieron tan nublados como la tarde.

FUENTE: SERGIO DANIEL PEYSSÉ (DIARIO LA NUEVA PROVINCIA).

FOTO: EMMANUEL BRIANE (DIARIO LA NUEVA PROVINCIA).

Sol de Mayo dio el golpe en Bahía Blanca al derrotar a Olimpo

Sol de Mayo le sacó el invicto de local a Olimpo de Bahía Blanca por la 16° fecha del Federal A y logró su segunda victoria consecutiva.

Sol de Mayo venció como visitante a Olimpo de Bahía Blanca por 1 a 0, por la décima sexta fecha de la Zona Sur del Torneo Federal A. Hizo un gran partido y derrotó al puntero, que se quedó sin invicto como local en el Roberto Carminatti.
Apenas unas horas después de la confirmación de la salida de Marcelo Pontiroli como técnico, Sol de Mayo consiguió una victoria clave de visitante que le permite seguir prendido en el lote de arriba de la zona A.
El presidente del club Adán Valdebenito tomó el mando técnico, junto a Mario Martínez como asistente, para conseguir un triunfo que estuvo trabajado desde el inicio del partido, complicando al dueño de casa.
En la primera parte del partido, Sol de Mayo tuvo chances de ponerse al frente con un remate de Diego Galván, a los 12 minutos, que terminó salvando el defensor Martín Ferreyra.
Después de esa jugada, Olimpo entró en a escena y generó peligro en el área del equipo viedmense con el juego aéreo. Primero fue Ferreyra, que llegó en soledad por el segundo palo pero le faltó puntería.
La visita no se quedó atrás, recuperó la pelota y el duelo se emparejó. Le faltó el último toque, pero siempre jugó cerca del área rival.
En los diez minutos finales del primer tiempo, el partido bajó su nivel. Es que Sol obligó a Olimpo a jugar a los pelotazos, con un buen trabajo defensivo. La batalla se dio sobre el mediocampo, donde el Albiceleste terminó jugando mejor.
Sobre el cierre, otra vez el juego aéreo complicó a al equipo de Viedma. Juan Perotti-a dos metros del arco- tuvo un cabezazo, pero la fortuna le sonrió al Albiceleste porque la pelota dio en el palo, en la jugada más clara de los primeros 45 minutos.
En el arranque del complemento, Sol de Mayo se puso en ventaja. A los 3′, Lucas Malacarne metió la pelota dentro del área chica y, por una mala salida del arquero Guido Villar ante la presión de Diego Galván, se generó un rebote que aprovechó Maxi Osurak para poner el 1 a 0. Primer gol para el delantero en su segundo partido con la camiseta de Sol de Mayo que sorprendió al equipo bahiense.
El local no tuvo reacción, porque a los 9′ se quedó con diez jugadores cuando se fue expulsado Sebastián Fernández, que recibió su segunda amarilla cuando cortó un contragolpe de la visita.
Olimpo salió con todo a buscar el empate que no fue posible a los 18′, gracias a la reacción de Nicolas Maza que contuvo en dos tiempos una pelota complicada.
Cuando promediaban los 25′ el equipo dirigido interinamente por Adán Valdebenito tuvo chances de aumentar la diferencia tras un remate de zurda Diego Galván, pero el palo le negó el festejo.
Olimpo agotó los cambios a los 30 minutos en la búsqueda del empate y Sol de Mayo dejó a su rival sin ideas, pero tampoco pudo liquidar de contra.
El "Albiceleste" se cerró atrás y logró asegurarse una victoria vital – la séptima en el torneo- de cara a la pelea de arriba.

SÍNTESIS:

Olimpo Bahía Blanca:
Guido Villar; Gustavo Mendoza, Nicolás Capraro, Martín Ferreyra, Juan Perotti; Ivo Di Buo, Sebastián Fernández, Brian Guille; Nelson Da Silva y Naid Hadad.
DT: Carlos Mayor.

Sol de Mayo:
Nicolás Maza; Maxi Paredes, Lucas Malacarne, Diego Salazar, Fabricio Elgorriaga; Mariano Rivadeneira, Matías García, Gonzalo Muscia, Juan Aguirre; Diego Galván y Maxi Osurak.
DT: Adán Valdebenito.

Goles: ST, 3 Maxi Osurak (SM)
Expulsado: 9 Sebastián Fernández (O)
Cambios: ST, 13 Luis Vila por Da Silva y Abel Méndez por Hadad (O); 20 Antonio Erburu por Rivadeneira y Alex Díaz por Aguirre (SM); 30 Facundo Afranchino por Mendoza y Alejo Blanco por Amarilla (O); 41 Matías Olivera por Muscia y Fernando Valdebenito por Galván (SM); 45 Iván Escobares por Osurak (SM).
Árbitro: Álvaro Carranza (Villa María, Córdoba).
Cancha: Roberto Carminatti de Bahía Blanca.

FUENTE: CARLOS MORANDO (DIARIO RÍO NEGRO).

SÍNTESIS: DIARIO RÍO NEGRO.

FOTOS: EMMANUEL BRIANE (DIARIO LA NUEVA PROVINCIA).

Domingo 26 de junio de 2022, 19:06