El objetivo que se proponen todos los técnicos para un nuevo torneo es mantener una base del torneo anterior y reforzar el equipo con hombres de experiencia. Por eso es que en el Chacarero se han tomado el tiempo necesario para buscar lo que requieren y lo que creen que puede ayudar para poder lograr el objetivo.
Estos nombres ya se venían manejando y ahora están confirmados. Darío Devia, el ex Guaymallén, que puede desempeñarse como defensor y como volante, un jugador que conoce y le gusta mucho a Marcelo Vázquez. Otro es Maximiliano Rosales, puntano que juega como lateral, que viene de Juventud Unida y tuvo un último paso por Alumni de Villa María. Y el otro es Uriel Raponi, marcador central zurdo, que igualmente puede jugar en todas las posiciones, proviene del Nardò, un equipo del ascenso de Italia.
Además hay muchas chances de cerrar la incorporación del delantero Martín Uranga. El Torpedo es un jugador siempre buscado por el Chacarero y que al DT, Marcelo Vázquez le interesa tener en el plantel, ya que lo conoce de Alianza (SJ). Es un jugador veloz y con mucha experiencia, además de convertir goles.
En tanto que para defender la portería, con Leo Díaz la diferencia económica impediría el arreglo y el arquero con el que están hablando y podría haber un acuerdo es Sebastián Portigliatti, quien estuvo en las inferiores de River Plate, también en el ascenso de Italia y la última temporada la disputó en el arco de El Linqueño en el torneo Argentino B.
Se mueve el mercado y el Chaca se va armando pensando en ser protagonista y poder lograr el ansiado objetivo del ascenso. Además la lista es larga y las charlas con otros posibles refuerzos continúan, van llegando y llegarán más.
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