GIMNASIA Y TIRO SE IMPUSO POR 2 A 1 A CENTRAL NORTE Y SE CONSAGRO CAMPEON
Es la banda del verano
Con un equipo formado con varios juveniles, el albo se impuso a los titulares del cuervo y se llevó el torneo gracias a los goles a favor.
Gimnasia y Tiro desplegó en la lluviosa tarde en el Padre Martearena a su auténtica “banda del verano”, la más afinada, la más armónica, atildada y la que mejor “tocó” en esta etapa de preparación entre los tres equipos salteños que se preparan para el torneo en serio, el Argentino A, que se reanudará el próximo fin de semana.
El albo, con un equipo en su mayoría suplente -presentó en su formación solo a dos jugadores que arrancarán en el once titular el próximo sábado ante Alumni de Villa María en el Gigante del Norte- y con una importante batería de promisorios juveniles entre sus filas, se impuso por 2 a 1 a los titulares del cuervo, para quedarse con el triangular de verano que organizó el Gobierno de la Provincia. Pese a igualar en puntos y en diferencia de gol con Juventud Antoniana (4 unidades cada uno), el líder absoluto del Argentino A sacó un “plus” en cantidad de goles a favor (convirtió 3 y el santo solo 2), lo que le permitió al equipo del Tano festejar su primer éxito del verano.
Pero a la hora de analizar lo verdaderamente sustancioso, el desempeño colectivo de dos equipos que se preparan para la competencia fuerte, fue Gimnasia el que dejó mejor impresión y el que más juego propuso ante un azabache que se presentó con el equipo que de seguro recibirá el viernes a Central Córdoba de Santiago del Estero. La solvencia de Diego Ianiero y Rodrigo López en la faz defensiva, el partido sin fisuras que desarrolló Maxi Gómez, siempre punzante por la banda derecha, y las sociedades entre Franco Ascencio y Juan Pablo Zárate fueron lo mejor del puntero, que sigue mostrando variantes que no desentonan y están a la altura de las circunstancias. Sin obviar, por supuesto, la gratificación de jóvenes promesas que aseguran un futuro promisorio y que demostraron a pleno sus condiciones. La mala tarde de Martín Perelman, siempre dubitativo en las alturas (fue responsable del gol de Campos tras un salida errática y pocas veces brindó seguridad) y la falta de rodaje de Leandro Zárate, que no estuvo en su nivel, pese al gol, fueron las únicas fisuras del ganador.
El campeón del verano dio vuelta otra página ante el cuervo y mira a todos con mejor semblante pensando en su máximo objetivo.
EL TRIBUNO
Domingo 20 de enero de 2013, 17:41