Güemes 2-1 Sarmiento (LB)

El Gaucho venció como local al Profe por 2 a 1 en la Isla y mantiene la ilusión de permanecer en la categoría. Emiliano López puso en ventaja a la visita, pero Gustavo Suárez y Alan Barrientos dieron vuelta la historia. Séptimo partido consecutivo sin festejos para los bandeños.

Sábado de vigilia en La Isla para resurrección de uno de los dos. Güemes con el fantasma del descenso a sus espaldas y Sarmiento con ansias de levantar 6 partidos sin victorias y asegurarse la ansiada clasificación.

Cuando la gente se estaba acomodando el primer golpe para el local. Pelota larga puesta por De Marco a espaldas de una última línea fría, Emiliano López tuvo tiempo de todo en el punto de penal y definió tranquilo para el 1-0.

Por como estaban las cosas se presumía cachetazo rápido para la lona y entonces la sorpresa 4 minutos después. Noriega lanzó un centro bárbaro y el Trochi Suárez sin marcas clavó un cabezazo letal que se fundió en el costado izquierdo de la red, 1-1.

El encuentro era desprolijo pero sin ser superior, Güemes merecía estar al frente en el marcador por la actitud que demostraba en las acciones.

El visitante no encontraba el balón y de no ser por dos buenas apariciones de García estaría abajo. La primera ante un golpe de cabeza de Suárez luego de un tiro de esquina y luego en un mano a mano a Barrientos.

El presagio se cumplió. Iban 43, Noriega ejecutó un tiro libre exquisito, a las espaldas de la defensa y de Serrano (que jugó un partido para el olvido), Barrientos la controló con el pecho y quemó la red para el delirio de La Isla, 2-1.

El complemento fue más de lo mismo en lo que respecta a juego, dos elencos sin ideas. Los primeros 20 se fueron con el viento norte cálido; la única en ese tiempo fue para De Marco que la estalló en el palo.

Los de Yocca se replegaron a esperar una contra y basaron su destino en los desaciertos de la delantera rival y esta vez la suerte estuvo con ellos.

A los 45, Gregorio González se la bajo a De Marco que con Tessa jugado la punteó y se fue apenas por arriba. Pero en el tercer minuto de adición sucedió lo increíble.

La pelota le cayó a González que ingresó por el callejón del medio, eludió al arquero y con el arco a su disposición la mandó por arriba el horizontal, cuando muchos corazones se habían paralizado.

La tarde se despidió con el último bostezo del sol acompañado por el pitazo final. El Gaucho hizo su parte para resucitar y se quedó con una victoria a lo Gaucho.

Ahora deberá esperar que los resultados acompañen este domingo. A seguir rezando.

Fuente: SomosDeporte.com

Sábado 30 de marzo de 2013, 20:13