Alumni (Villa Maria) 0 - 4 Racing (Cordoba)
Racing le ganó a Alumni y sueña con salvarse del descenso
La Academia goleó 4-0 al Fortinero con un gran primer tiempo de Bubas y una buena actuación ofensiva. Hubo domingo de resurrección para los de Islas.
Por Por Agustín Caretó - MUNDO D de Cordoba
En el marco de la cuarta fecha de la Zona Norte de la Fase Reválida del Torneo Argentino A, Racing superó 4-0 a Alumni, en la Plaza Manuel Anselmo Ocampo de Villa María.
La contundencia de Racing le permitió marcar en cuatro de cinco ocasiones. La Academia presionó y dio una muestra de personalidad para jugar un partido decisivo pensando en la permanencia en el campeonato.
La actuación del goleador Bubas alcanzó para ser considerado la figura del partido, aunque Godoy también tuvo una destacada labor.
Alumni no tuvo la eficacia de su rival, y desaprovechó las pocas llegadas que creó. Un equipo sin alma pareció entregado cuando recibió los primeros goles y jamás reaccionó.
A los 14 minutos, cuando el partido estaba trabado en la mitad de la cancha y ninguno de los dos equipos producía jugadas claras, Nicolás Bubas recibió sólo y la cruzó al palo izquierdo de Basabe.
Racing ponía el 1-0 que abría el marcador y le daba tranquilidad a los dirigidos por Luis Islas. Y a los 23, para empezar a sentirse cómodos en campo ajeno, volvió a aparecer Bubas y puso el 2-0.
Cuando corrían 29 minutos, Godoy respondió bien y salvó una jugada de peligro.
A los 38, Cuevas perforó la línea de tres de Racing pero no pudo convertir.
Al minuto, Bubas fue bajado en el área visitante y Arco decretó el penal para Racing.
Cristian Rami se hizo cargo y firmó el 3-0 para la Academia.
A los 14 minutos del segundo tiempo, en una de las pocas jugadas de peligro que hubo, Hernán Pérez marcó un golazo.
Definió con tres dedos y se la picó por arriba a Basabe que nada pudo hacer.
Cómo sigue
Racing quedó con 22 puntos, uno por debajo de Alumni que posee 23 pero que tiene una fecha más. Los de Luis Islas dependen de sí mismos para mantener la categoría.
Argentino A - Fase Reválida - 4ta. fecha - Zona Norte
¡Qué desastre!
Alumni jugó muy mal el partido decisivo contra Racing, que lo goleó 4-0 en Plaza Ocampo y lo dejó muy complicado con el descenso
Escribe: Juan Manuel Gorno - DIARIO DE VILLA MARIA
Si en un partido bisagra por la permanencia en el Argentino A, Alumni juega como un equipo de Argentino B, indefectiblemente tiene más destino de descenso que nunca.
Esto se verificó ayer, en Plaza Ocampo, donde el equipo villamariense dejó pasar -otra más, y van...- una gran oportunidad para escapar de la caída libre hacia la categoría menor: perdió 4 a 0 ante Racing de Córdoba, nada menos, en una verdadera final que sólo tuvo público local y, sin embargo, terminó como una fiesta visitante, sin excusas.
Alumni había preparado el contexto para no sufrir en casa, donde encontraba su norte más seguido que los rivales y había derrotado a equipos más encumbrados. Pero esta vez entendió el partido para otro lado.
Inocente, quizás comprendió que la actitud pasaba más por trabar una pelota con esfuerzo y no por mostrarse y manejarla con criterio. Entonces salió a jugar alocadamente, casi sin pensar, desordenado, dubitativo, y en menos de 25 minutos ya perdía 2 a 0, una diferencia fatal para este tipo de enfrentamientos donde el mínimo error te lleva al fracaso.
Es cierto que Racing de Córdoba tuvo sus grandes méritos, sobre todo por la contundencia de sus avances que tuvieron epicentro en la figura del delantero Nicolás Bubas, autor de los dos primeros tantos. Tan cierto como el acierto en la propuesta del entrenador Luis Islas para presionar arriba con su línea de volantes y ahogar la salida de Alumni.
De todas maneras, ni el más optimista de la "Academia" esperó sacar una diferencia de tres goles al término del primer tiempo. Pero todo se mezcló: la eficacia del visitante hizo un combo con las impericias del local, un Alumni desastroso por donde se lo mire, que careció de patrón de juego y regaló pelotas y espacios con la misma frecuencia.
Para certificar la distancia en la red, Bubas fue determinante. Empezó moviéndose por derecha, pero supo tirar bien las diagonales para filtrarse por la izquierda, desde donde primero habilitó a Cristian Rami (que remató desviado) y luego marcó el primer tanto, aprovechando un yerro en el cierre de Federico Silvestre, a los 14 minutos de juego.
Alumni se vio sorprendido, pero no tuvo reacción con juego y siguió de pelotazo en pelotazo, desorbitado y sin inteligencia para el equilibrio futbolístico y emocional.
El orden de Racing en la mitad de la cancha, donde se juntaron con buen pie Diego Bonaldi, Víctor Cejas y Nicolás Argüello, marcó permanentemente el retroceso de Alumni y eso resultó vital para que ni Carlos Herrera ni Walter Cuevas pudieran recibir algo limpio en el ataque local.
El resultado de esto fue el segundo gol de la "Academia", tras pase de Argüello y definición de Bubas.
Recién luego del segundo grito visitante alcanzó a despertar Alumni, con Alejo Gelatini pidiendo la pelota para asistir a Santiago Aloi y Cuevas y con Diego Villagra proyectándose para habilitar a Herrera. Sin embargo, a la leve mejoría le faltó lo más importante: el gol, algo que supo evitar con solvencia el arquero Gerardo Godoy.
Por entonces, además, el nerviosismo -que desde un principio debía ser propiedad del equipo que llegaba último- se adueñó completamente del local. Y esos dos mazazos de Bubas aplacaron casi en plenitud el fervor que pudo haber tenido algún hincha villamariense en su arribo al estadio.
La goleada
Racing ganó en confianza con sus goles y controló psicológicamente el partido hasta esperar otra genialidad de Bubas, a quien le alcanzaron sólo 45 minutos para convertirse en el hombre top del partido.
El atacante salió lesionado a los 47 minutos (tendría un esguince), pero antes de ser remplazado por un defensor (Maximiliano Ortiz), armó una jugada personal que terminó en penal cometido por Gelatini.
Cristian Rami puso el 3-0 a los 40 minutos y luego Bubas se retiró feliz, aunque golpeado.
De ahí en adelante, el partido fue otra historia. Alumni empezó el segundo tiempo con pelota y campo de juego a su favor, ante un rival que se agazapó para salir de contragolpe, olvidándose de la propuesta inicial (el 3-4-2) para armar dos líneas de cuatro delante de su arquero.
El ingreso de Diego Torres fue una bocanada de aire fresco para el toque corto del equipo villamariense, pero la efectividad no dejó de ser de Racing: a los 14m Argüello habilitó a Pérez por derecha y el volante, ante la salida solitaria de Basabe, resolvió como los dioses, en la única llegada sobre el arco rival que tuvo Racing en todo el complemento. 4 a 0.
Lo que quedó para después fueron las sobras, sólo minutos para que mucha gente de Alumni se retirara del estadio y otra tanta se quedara insultando.
Nadie esperaba semejante resultado, entonces hubo quienes, impotentes, sólo atinaron a salir mudos, mirando al piso. Mirar para adelante es el futuro. Y Alumni, de acuerdo a lo visto ayer, no parece tener uno bueno.
La figura
El delantero Nicolás Bubas jugó 47 minutos y fue la gran consagración del partido. Marcó los dos primeros tantos y provocó el penal que derivó en el tercero de Rami. También se lució el arquero Gerardo Godoy y tuvo gran participación Nicolás Argüello en los pases gol.
El árbitro
El mendocino Alejandro Arco no aceleró el juego, se desplazó mal en la cancha y eso lo llevó a equivocarse en algunos fallos, más allá de que pueden ser discutibles algunas situaciones. Debió expulsar a Gastón Molina (estaba amonestado y bajó de atrás a Cuevas) y no lo hizo.
Lunes 01 de abril de 2013, 02:29