Gimnasia (LP): Facundo Sanseverino, el pibe que nado por alcanzar su sueños
Un metro ochenta de agua en su barrio no impidió su llegada a Estancia Chica para entrenar, por primera vez, con el plantel de Gimnasia
“El éxito de la vida no está en vencer siempre, sino en no rendirse nunca”. Así se presenta Facundo Sanseverino (18) en su perfil de la red social Twitter, el juvenil de Gimnasia que salió del anonimato por ser el protagonista de una historia de gran esfuerzo y superación.
DIARIO EL DIA DE LA PLATA
El martes a la noche, cuando el temporal ya había azotado la Ciudad, Facundo y su familia se refugiaron en la planta alta de la casa de una vecina porque en la suya el agua había hecho estragos.
“Estábamos en mi casa y de repente, de un momento al otro, el agua llegó a un metro ochenta”, contó el volante izquierdo de la 5º División de Gimnasia, sobre cómo vivió el trágico temporal en su humilde vivienda de Los Hornos (69 entre 136 y 137), en la que vive con su abuela, su hermanito, su mamá y su pareja.
Sin poder creer el panorama que registraban sus ojos desde la ventana de su vecina, el teléfono celular de Facundo sonó pasadas las once de la noche y, esta vez, traía buenas noticias. “Me llamó el coordinador para que al otro día me presentara en Estancia Chica a entrenar con la Primera y yo le dije que no sabía si iba a poder llegar porque el barrio estaba todo inundado”, relató.
Una mezcla de sensaciones invadieron en ese momento la mente del joven que, desde los 9 años, cuando empezó a jugar en el club, soñaba con esa convocatoria. “Estaba pasando una situación muy mala con mi familia pero a la vez estaba tratando de luchar por el sueño de tantos años, y esta oportunidad no pasa dos veces. Entonces sentí que tenía que aprovecharla”, contó Facundo ayer a EL DIA, emocionado.
Cuando el agua comenzó su retirada, cerca de las siete de la mañana del miércoles, Facundo volvió a su casa para confirmar la sospecha que, horas antes, ya había imaginado: el agua se había llevado todo. Aún así, su mamá lo alentó para que, como sea, se presentara en la práctica y pudiera al menos tener la chance de intentar cumplir su anhelo.
Sin dormir, Facundo rescató un bolsito y un par de pilchas deportivas, pero se le presentó otro desafío: nadar a brazo partido, al menos unas cuadras, para llegar a destino. Sin embargo, otro vecino solidario lo encontró en medio del agua y, gentilmente, se ofreció a llevarlo en el taxi que maneja. “Tuve la suerte de que le arrancó el auto. Fue difícil, porque la ciudad era un caos, pero pudimos llegar”, destacó.
De los cuatro juveniles que el coordinador había convocado, sólo él se presentó. Y el encuentro con los jugadores de Primera, a los que siempre había querido conocer en persona, fue mejor de lo que alguna vez imaginó.
Conmovidos por el relato de su historia de esfuerzo y superación, jugadores, cuerpo técnico y dirigentes tomaron a Facundo Sanseverino como un ejemplo de perseverancia y ayer lo invitaron especialmente a presenciar el choque entre Gimnasia y Almirante Brown en Isidro Casanova.
Facundo no se olvidará nunca de esta experiencia, y de haber recibido la ayuda en su barrio -que muchos como su familia, perdieron todo por el temporal- de sus máximos ídolos,.
Todas las palabras que salían ayer del juvenil jugador, que el técnico Pedro Troglio ahora pone como un ejemplo al esfuerzo, eran de agradecimiento: a los jugadores, al cuerpo técnico y a los directivos, entre otros. “Mi sueño es poder jugar un día en la Primera de Gimnasia y devolver el apoyo y el cariño que me dieron”, concluyó.
Sábado 06 de abril de 2013, 08:33