Guillermo Brown de Pto.Madryn 2 - 1 Alumni de Villa Maria
DESCENDIO ALUMNI DE VILLA MARIA AL ARGENTINO B
Esta tarde en Tres Arroyos se jugó el partido que definía el tercer descenso del Argentino A entre Guillermo Brown de Puerto Madryn y Alumni de Villa Maria. Al cabo de los 90 minutos igualaban 1-1. Abrio el marcador Diego Gimenez a los 13 de ST para "la banda". Minutos mas tarde, a los 20 del ST, Brown quedaba con 10 jugadores merced a la expulsión de Martin Dedyn. Con todo Alumni se fue en busca del empate, que llego a los 33 del ST, conquista a cargo de Carlos Herre
ra. Asi llego el tiempo suplementario. Rapidamente los cordobeces se quedaron con 10 por la expulsión de Matias Espindola. Y cuando faltan 3 minutos para los penales llego el gol que salvo a Brown y sello la suerte de Alumni, el encargado fue Tevez.De esta manera Guillermo Brown mantiene la categoria y Alumni descendió al Argentino B 2013/2014 junto a Racing de Cordoba y Sportivo Desamparados de San Juan.
Lágrimas de descenso
Alumni tuvo muchas oportunidades y podría haber ganado. Aquí el arquero de Brown frustra un ataque de Walter Cuevas
Después de arañar durante tanto tiempo el filo de la cornisa para sostenerse con vida en la tercera categoría del fútbol argentino, Alumni finalmente cayó anoche al Torneo Argentino B. Un final triste para el club, para el fútbol villamariense y para la gente que coqueteó con el sueño del crecimiento futbolero de la ciudad.
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Las lágrimas de los más de 200 villamarienses que viajaron hasta Tres Arroyos así lo certificaron, tras la agónica derrota -2 a 1, en tiempo suplementario- que el equipo sufrió ante Brown de Puerto Madryn. Lágrimas bajo el frío de una noche que pintaba para felicidad y, a falta de tres minutos, se cargó de tristeza. Lágrimas de impotencia porque se acababa de esfumar una gran oportunidad histórica entre las manos, cuando pocos pronosticaban un cierre de esta magnitud. Lágrimas de injusticia por lo que acababan de ver en la cancha de Huracán de Tres Arroyos. Lágrimas por el “ya no ser” que siempre deja un descenso.
Alumni había jugado como para quedarse en la categoría y conservar ese mote de “Duro de matar” que supo ganarse en tres promociones consecutivas y en los penales ante Racing. Pero el fútbol no entiende de merecimientos. Matemáticamente, se gana con goles. Y para ello, Brown aprovechó que tuvo en cancha a dos tipos oportunos para batir el arco de enfrente. Con eso barrió todo el esfuerzo, el toque más preciso y la mayor búsqueda que había mostrado el elenco villamariense a lo largo de todo el partido.
En líneas generales, Alumni anduvo casi siempre más cercano al éxito, pero cuando menos se lo esperaba, sufrió dos veces en el arco propio y se encontró con el descenso abriéndole las puertas.
Desde el arranque del partido, Alumni parecía más claro en la circulación de la pelota, a pesar de que debió lidiar con el viento en contra.
Con Walter Cuevas desbordando desde la derecha y Santiago Aloi encarador por la izquierda, en pos de sumar gente al ataque, el entrenador Héctor Arzubialde había planeado tener mayor presencia ofensiva y eso entusiasmó. Mientras, Brown no llegaba a conectar en los metros finales porque Juan Manuel Tévez, quien a la postre terminó siendo el jugador decisivo de la historia, estuvo muy aislado en el primer tiempo.
Sólo las corridas de Martín Dedyn para la recuperación de la pelota, los cierres expeditivos de Lisandro Beratz en el fondo y el empuje de Tévez se destacaban en el equipo sureño, aunque todo por debajo de un Alumni que, merced a la sapiencia de Alejo Gelatini y la movilidad del resto, crecía desde el pie, a pesar de que por momentos abusaba del pelotazo desde la defensa.
El arquero Sebastián Pereyra tuvo que reaccionar ante Herrera y Altuna, antes de ver cómo “Falucho” dilapidaba una chance con remate cruzado. Y con este panorama, quien debía cambiar su imagen para el complemento era Brown.
Luis Murúa, DT de “La Banda”, captó el mensaje y no dudó en mandar a la cancha a su jugador fetiche, Diego Armando Giménez, quien llegaba al partido luego de 30 días de rehabilitación por un desgarro.
El cambio no pudo haber sido tan efectivo. Es que, en menos de 15 minutos, Giménez hizo más que todos: primero quiso sorprender con una media vuelta que pasó cerca del palo. Y después, envió un remate tan impecable que la pelota pegó en el poste y se metió.
Brown se puso en ventaja y pasaba a mostrarse entero, pero se desilachó rápidamente cuando Dedyn, el motorcito de su línea de volantes, vio la segunda amarilla y se fue expulsado, mientras Giménez debió salir remplazado por haberse resentido de la lesión con aquel remate certero.
Alumni respondió de la mejor manera, a medida que Arzubialde buscaba mayor desequilibrio de ataque con los ingresos de Diego Torres y Nicolás Gayoso.
Llamativamente, no fue Torres quien esta vez le dio frescura al juego del equipo; sí lo hizo Gayoso cuando, desde el sector izquierdo, se juntó con Aloi para encarar. Desde allí llegó un centro del propio joven, a los 33 minutos, que le puso justicia al partido, con el toque goleador de Carlos Herrera para marcar el 1 a 1.
Con un hombre de más en cancha, un rival atrincherado y un Gelatini lúcido, Alumni tenía todo para ganar, menos la sapiencia para trasladar sus buenas intenciones al arco contrario.
Hubo que seguir sufriendo en tiempo suplementario. Y allí pasó de todo.
En la primera etapa se fue mal expulsado Espíndola, se lo perdió Tévez frente a Scalzo y luego no la pudo meter Reina (tras jugadón de Herrera), con el arquero Pereyra vencido.
Y en el último tiempo del alargue, Aloi fue quien dilapidó su oportunidad, cuando Alumni apretaba para ganarlo y se mostraba más entero en todo sentido. Sin embargo, una pelota larga, una subida con criterio del lateral Strano y un centro que Scalzo no supo controlar, terminaron en el frentazo de Tévez, por el segundo palo, que desató la fiesta de medio Puerto Madryn.
Alumni se quedó lamentando por lo que había desaprovechado, no sólo en el partido, sino en el resto del campeonato. El replanteo será necesario, aunque rápidamente se necesiten los tiempos de mirar para adelante.
La figura
Juan Manuel Tévez terminó erigiéndose en la figura de la tarde-noche por haber definido la permanencia de Brown, con un cabezazo oportuno. Además, se las bancó bien solito en ataque contra toda la defensa de Alumni. En cuanto a juego, lo mejor fue Alejo Gelatini.
El árbitro
El santafesino Carlos Boxler se equivocó en mostrarle la segunda amarilla a Espíndola por una falta que no la ameritaba, ya que el jugador dominaba la pelota y cometió infracción sobre un rival sin intención ni violencia. En lo demás, el árbitro estuvo correcto y terminó el partido sin problemas.
“Es un día muy doloroso”
Arzubialde siente el impacto en su rostro. El partido terminaba y Alumni perdía la categoría
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El golpe de nocaut que Alumni recibió con el pitazo final, no dio margen para reacción desde ningún punto de vista. Los jugadores sólo atinaron a mirar al suelo y a llorar de bronca e impotencia. Mientras, como el tipo correcto que siempre fue, Héctor Arzubialde se mandaba rápidamente a la cancha para abrazar a uno por uno y convocarlos a una rueda final, la rueda de la despedida.
“Ustedes dejaron todo, el fútbol da revancha y ustedes la van a tener porque se la merecen”, dijo Arzubialde, rodeado de todos los futbolistas, los que jugaron, los del banco y hasta los que estaban afuera, por lesión o suspensiones.
Curioso destino el de Alumni, que había logrado el ascenso, precisamente, con los hermanos Arzubialde, los mismos que ayer pugnaban por entrar a otro lugar histórico, queriendo en salvar al equipo de dos desempates consecutivos, ante Racing primero y Brown después.
Sin embargo, hay cuentos maravillosos que no tienen final feliz. Este fue el caso.
“Es un día triste para todos”, reconoció el técnico, pero aclaró: “Acá hay muchos pibes a los cuales el fútbol les dará revancha, esto seguramente les servirá para crecer”.
“Aún en el peor momento hay que saber perder, hay que barajar y dar de nuevo, porque de aquí en más comienza una nueva etapa”, agregó, muy dolido, pero sin quebrarse.
Después de todo, en la lucha táctica y del planeamiento de partido, Arzubialde había mostrado una jerarquía importante. Lo que faltó fue la “tranquilidad para definir”, según él mismo reconoció.
“Hemos cometido algunos errores, siempre buscamos más el partido porque los que más apostamos a ganar fuimos nosotros; ellos esperaban el empate nomás para ir a los penales, pero poco nos quedó por hacer cuando sufrimos un gol”, comentó el DT.
En medio de un clima de tristeza, Arzubialde no quiso hablar del futuro, aunque ensayó un cierre de círculo y prefirió hacerlo con agradecimientos: “Quiero agradecer a toda la gente que vino y a todos aquellos que siempre dejaron todo por este club”.
“A toda la gente de Villa María les pido disculpas por no haber podido cumplir con el objetivo al cual vinimos, el cual estábamos todos ilusionados… Para mí es un dolor grande porque apostaba a armar algo yo e ir en búsqueda de mejores destino para Alumni, pero de aquí en más ya veremos cuál es el destino”, afirmó después. Y agregó: “Debemos tener la cabeza fría, el hincha estará dolorido, seguramente que alguna gente aprovechará este momento para hacer leña del árbol caído, pero bueno, yo quiero rescatar la hombría de los jugadores y el apoyo de toda la gente para cumplir con ellos”.
En lo personal, Arzubialde -que sufrió el tercer descenso como DT- no se mostró dramático: “A mí no se me ha caído nada por pelear con esta gente la posibilidad de crecer; si hay una forma de irse al descenso, es peleando hasta el final y creo que los jugadores lo hicieron”.
“Pensamos que íbamos a llorar de alegría, pero lloramos de tristeza; el fútbol es así, si fuese por merecimientos y por puntos, era Alumni el que se quedaba, pero el fútbol se basa en dos arcos”, dijo después.
Por último, Arzubialde dijo quedarse “con todo lo que dejaron los jugadores, por toda la gente que creyó en nosotros”.
“A veces la historia del fútbol la escriben los que ganan, los que pierden pareciera que no servimos para nada, pero nosotros, hace seis o siete años nos tocó vivir un ascenso con esta institución, con esta camiseta, a la cual quiero mucho y de la cual siempre estuve pendiente, de eso no me olvido”, aseveró.
Además, si bien reconoció que “esto para Alumni es doloroso”, sostuvo que el club “ha crecido, quizás pudo crecer más, pero en este momento me estoy haciendo responsable de algo de lo que quizás no soy el ciento por ciento responsable, cada uno lo manejará individualmente”.
Brown no se baja: consiguió una agónica victoria sobre Alumni
Le ganó 2 a 1 en Tres Arroyos para asegurar su continuidad en el Argentino A. El desequilibrio llegó en el suplementario, tras el empate 1 a 1 en tiempo reglamentario.
DIARIO JORNADA
En un duelo para el infarto y a tres minutos del final del suplementario, la Banda pudo doblegar a Alumni.
En la agonía del partido Brown encontró el resultado y la victoria que se le negó a lo largo de todo el año en la categoría, la conquistó en el partido que necesitaba hacerlo para poder seguir en el Argentino A, después de un año malo y de un descenso desde la B Nacional, que había sido un gran premio a su lucha de años buscando trascender en el fútbol nacional.
Ayer ponía en riesgo y en juego esas estrellas que supo acuñar su estadía en la segunda categoría del fútbol federal y merced a los goles de sus dos futbolistas franquicia logró quedarse, no sin sufrir durante los 120 minutos que duró el largo e intenso partido y que determinó el descenso de Alumni de Villa María, acompañando a Racing de Córdoba y Desamparados de San Juan.
Desde lo anímico, el de ayer, era el peor partido que le tocaba afrontar a Guillermo Brown en los últimos 10 años de historia en la categoría porque esta instancia no la había afrontado nunca y aunque venía de caer de la B Nacional seguir retrocediendo era un golpe difícil de asimilar. Pero en los últimos 120 segundos de un juego de 120 minutos, encontró el gol, el respiro, el desahogo que buscó durante la parte final del torneo y no encontró, por lo que tuvo que dirimir en un desempate su continuidad en una categoría que lo supo ver campeón en el 2007 y en el 2011, con ascenso a la B nacional incluido.
Se viene un barajar y dar de nuevo, los habituales replanteos y repensar el futuro del plantel, y su nueva participación en una categoría de la que es un actor protagónico más allá de este año olvidable.
Poco pasaba en los minutos iniciales y el peso de final que tenía el partido lo sintieron los dos, aunque fueron soltándose a medida que transcurría el juego comenzaban a aparecer algunas situaciones, generadas varias de ellas a través de pelota parada.
La primera aproximación de Brown fue después de una combinación entre Dedyn y Pereyra, y el remate de éste desde el borde del cuadro grande se fue alto.
Con el correr de los minutos Alumni se adelantó y tuvo a su favor varios tiros de esquina, que si bien no inquietaron metieron a Brown contra su propia área, con las dificultades que eso genera, al estar tan lejos del arco rival. El equipo cordobés siguió ahogando a Brown en el fondo, y el arquero Pereyra salvó dos veces a su equipo, primero ante el remate de Herrera y luego con Altuna, tapándole el cabezazo al medio del arco.
La segunda parte
El técnico Murúa cambió en el arranque del complemento a Pereyra por Diego Giménez buscando mayor peso ofensivo en los portuarios, que habían generado poco y nada en los primeros 45 minutos donde Tevez se desgastó en soledad.
La postura y la actitud del equipo fue diferente, intentando forzar errores defensivos del rival y lateralizando más el juego haciendo más ancha la cancha para aprovechar las trepadas de Vergara y Gallardo por los costados.
Enseguida, el goleador browniano Diego Giménez recibió otra vez y la clavó contra un palo para desnivelar el juego en apenas 10 minutos, donde los portuarios habían demostrado cierta superioridad con mayor presencia ofensiva.
A los 21’ Dedyn cometió una nueva falta y Boxler no dudó en amonestar por segunda vez al volante browniano que debió reacomodar sus líneas para defender con uno menos.
Alumni se vino con todo hacia adelante intentando arrinconar a Brown que debía retroceder unos metros para defender y el defensor Berardo, con un cabezazo apenas desviado, hizo respirar a los brownianos.
De tanto ir a buscar, Alumni encontró su premio con su goleador Herrera, que anticipó al golero Pereyra y dejó las cosas iguales en 30 minutos de juego, aprovechando su hombre de más.
Brown llegó otra vez con Aciar cuyo remate dio en el parante del arco de Scalzo, que no pudo hacer nada para detener el envío del volante browniano.
Después de esa maniobra, el dramatismo se apoderó del juego y los dos equipos, con lo que podían, intentaron buscar una última situación a favor que les permitiera desnivelar y aunque el equipo de Córdoba estuvo más cerca, el tiempo reglamentario finalizó empatado.
El alargue… y el desahogo
Brown debía bajar el ritmo que pudiera imponer Alumni aprovechando el hombre de más, pero por suerte para Brown a los 6’ Espíndola vio la segunda tarjeta amarilla en los cordobeses y los dos quedaron con 10 para jugar lo que quedaba de partido, en los primeros 15’ del alargue y la segunda parte.
Iguales desde lo numérico, ambos se la jugaban en cada maniobra y apostando a algún envío aéreo o remates desde media y larga distancia, buscando sorprender a los arqueros.
Después de una combinación con Moreno, Tevez tuvo el gol para Brown pero su remate se fue desviado muy cerca del palo.
A la vuelta también se lo perdió increíblemente Reyna para Alumni, que resbaló en el área con la pelota a su merced.
En el segundo, Alumni tuvo una con Aloi que la tiró por encima del travesaño y darle un respiro a Brown que no podía hacerse del balón a partir del aporte de los últimos relevos que ingresaron en el equipo cordobés.
En el ida y vuelta con lo que quedaba de resto a los futbolistas de uno y otro equipo, Aloi sacó un remate que tapó Pereyra y en el rebote Duarte salvó a Brown de una nueva intervención del volante creativo de los de Villa María.
En el final, a los 11m un centro de Strano terminó en la cabeza de Tevez, que por el segundo palo anotó el tanto que le dio la permanencia en la categoría, en un final para el infarto para los brownianos, que invadieron la cancha festejando después de un año donde los resultados escasearon y obligaron al equipo a pelear esta definición en cancha neutral.
Martes 07 de mayo de 2013, 19:05
que descendiera :por que era una mentira ese club (de buena onda) no daba para mas
que no descendiera :por que era de la provincia y no me gusta que nadie descienda ademas se armaban lindos clasicos buenoi espero q asciendan pronto
Y para tu informacion vos no descendiste a nadie, nosotros bajamos del arg A en revalida contra Villa Ramallo. Ahora equipo chico pasas derechito con Atenas al TDI. Chauuuuuuuu equipo sin hinchas ni cancha, jugas en una plaza prestada.
Te espera tu papa eterno Estudiantes para coparte todas las localias y seguir manteniendote de hijo como siempre!!!. No vaya ser cosa que pases derechito al TDI con tu amiguita Atenas.
ALUMNI NO EXISTÍS...
NO TENES CANCHA...
CASI NO TENES SOCIOS...
CASI NO TENES SEDE...
ALUMNI, NO EXISTISSSSSSSSSSSSSSSSSS MUERTOOOOOOOOOOO...
AL FIN!!! SE HIZO JUSTICIA!! ALUMNI CAGON, SIEMPRE JUGASTE EL ARG A PARA NO DESCENDER PxxO!! NUNCA TE PLANTASTE TIRAPIEDRA CAGON!!