Kimberley (Mar del Plata) 2 - 1 F.C. Tres Algarrobos
Video del partido -
Kimberley ganó con lo justo cuando podría haber goleado
Kimberley tuvo todo para golear a FC Tres Algarrobos en la final de ida del Torneo Argentino C, pero no tuvo contundencia, ganó por 2 a 1 y dejó la serie abierta.
Por Sebastián Lisiecki - 0223.com.ar
El conjunto de Damián García había hecho todos los méritos para ir a la revancha con una ventaja más que importante, pero a diferencia de lo que le sucedió con El Fortín, cuando todo lo que pateó al arco fue gol, esta vez no estuvo fino en la definición, se encontró con una gran actuación del arquero Carreras y, por un error del suyo, Benítez, se tuvo que conformar con un triunfo por 2 a 1 que no es poco, pero sí menos de lo que mereció. En siete días, un empate le alcanzará al "dragón" en Tres Algarrobos para acariciar el ansiado ascenso al Torneo Argentino B, por la final de vuelta.
Las intenciones en el arranque fueron de Kimberley, con Zamorano y Ferreira jugando invertidos a diferencia de lo que habían mostrado ante El Fortín de Olavarría, con el “10” bien recostado sobre la derecha y tratando a partir de ahí de juntarse con los delanteros. Pero ese manejo de la pelota no lo llevó a generar peligro, mientras que la visita estudió el partido, esperó a ver lo que proponía el local y buscó complicar cada vez que podía meterse en vocación ofensiva. Y así fue, a los 3’, con un centro intrascendente de Pérez que Hertel peleó entre los centrales, le quedó el rebote y obligó a una rápida salida de Guillermo Benítez que, con todo el cuerpo, ahogó el primer grito.
El trámite siguió siendo el mismo, con control de los marplatenses sin riesgo y la profundidad era potestad de los de Pablo Tabasso, que a los 9’, otra vez hicieron levantar a la buena cantidad de gente que llegó desde Tres Algarrobos: Diego Álvarez cruzó bien de derecha a izquierda pero no la sacó, Hertel se la robó, metió el centro al segundo palo y Almirón metió un zurdazo bajo que se perdió besando el caño izquierdo de Benítez. La visita no se amilanó, se acomodó en el terreno y el mediocampo comenzó a jugarle de igual a igual a Murno-Servera que ya no tenía tanta tranquilidad para jugar.
El “dragón” necesitaba más apariciones de Zamorano, que estaba perdido sobre la línea lateral derecha y era bien neutralizado por Almirón. El tándem del medio tampoco encontraba libertades para elaborar y, por eso, la defensa visitante no pasaba mayores sobresaltos. Diferente era en la última línea local, donde Santos, Gómez y Hertel se las ingeniaban para complicar y dar sensación de peligro cada vez que pasaban tres cuartos de cancha.
Kimberley necesitaba a Zamorano, y el “10” apareció. A los 26’ le dio la razón a Damián García que lo puso por el sector derecho, antes de llegar al fondo metió un cambio de frente perfecto para la llegada de Ferreira, el volante no cerró los ojos, la bajó al medio para la llegada de De Hoyos y la “garza”, de zurda, la mandó al fondo del arco para darle la apertura del marcador y la tranquilidad al dueño de casa.
A partir de ahí, creció el “dragón”, empezó a encontrar espacios, se soltó. El gol pareció sacarle el nerviosismo de la final y Parra volvió a ser el Parra de los partidos anteriores, sin tanto estatismo, saliendo a los costados, juntándose con Zamorano que se cerraba para enlazar y De Hoyos que era el jugador más peligroso. Y lo demostró a los 35’, haciendo valer su velocidad por la izquierda, tiró la “bicicleta” ante la marca de Bornes que lo derribó adentro del área y Pablo Murno se hizo cargo de la ejecución para canjear por gol, con un remate suave, a la izquierda de Carreras que fue hacia allí pero no pudo sacar.
El 2 a 0 parecía exagerado por lo que había sido el desarrollo del partido, pero era el premio a la contundencia de Kimberley y el castigo a la mala puntería de Tres Algarrobos que tuvo tres situaciones netas y no pudo facturar. Las pelotas paradas en contra son una de las principales falencias del local y Pérez pudo descontar a los 40´, pero volvió a aparecer Benítez para salvar con la pierna. Con ese resultado se fueron al descanso y la sensación de que la visita podía llegar a dejar más espacios en el complemento que al equipo de García le podrían permitir empezar a definir la serie en casa.
El entrenador de Tres Algarroboks pensaba en el segundo tiempo pero también en la revancha, por eso sacó a Pérez que estaba con amarilla y Andreis no lo había querido echar antes del final de la primera etapa. Pero Kimberley tenía la cabeza puesta en irse con la mayor ventaja posible y salió decidido a marcar el tercero. Con un buen trabajo de Corti por la banda derecha, la movilidad de De Hoyos, la precisión de Zamorano y la peligrosidad de Parra, pudo aumentar. A los 6´, nomás, se juntaron el “10” y el “9”, y Carreras achicó justo ante la definición de “Pipi”. La visita era un equipo “pesado” y las diferencias de velocidad se notaban mucho. Encima, con espacio para la contra, se vuelve temible.
En un minuto, Kimberley tuvo el tercero dos veces. Primero De Hoyos aceleró y se lo “comió” a Ariznabarreta pero su zurdazo no tuvo la suficiente fuerza y contuvo el arquero. En la salida, Zamorano presionó y robó, llegó al fondo, no fue egoísta y buscó a Parra por abajo, Bornes barrió para evitar el gol y terminó reventando el travesaño de su propio arco. Era todo delo local que presionaba en tres cuartos de cancha rival, recuperaba rápido la pelota y estaba más cerca del cuarto que del tercero.
Parra no tenía una mañana lúcida a la hora de la definición y chocó con Carreras, Zamorano no pudo abrir el pie derecho y otra vez tapó el “uno”, el derechazo de De Hoyos se perdió cerca del palo derecho y más…todo eso pasó en menos de cinco minutos, con un Kimberley que era una aplanadora y un conjunto visitante que no hacía pie en el partido y firmaba la desventaja de dos goles para buscar revertirlo en su cancha. Apenas con pelotas detenidas, los de Tabasso podían acercarse a Benítez y, en el momento menos pensado, llegó el descuento. Un centro llovido desde tres cuartos de cancha, en un tiro libre, encontró una floja respuesta del arquero marplatense que no quiso sacar con los puños, buscó retener, la perdió y Santos, rápido, se la tocó para que la diferencia que estaba más cerca de ser de tres, sea sólo de uno.
Con ese tanto, creció Tres Algarrobos y se puso muy nervioso Kimberley, que sentía que podía haber sentenciado la serie y ahora estaba totalmente abierta. Sebastián Santos se adueñó de la pelota y empezó a manejar los tiempos del partido, enfriando cuando hacía falta y acelerando en el momento que veía la posibilidad. Se enmudeció el “José Valle” con un exquisito tiro libre de Gómez que pegó en el travesaño y picó en la línea del arco de Benítez que nada podía hacer. Dalmao recuperaba, Santos la tenía y la visita terminaba dejando una mejor imagen.
El final del partido mostró la desazón de los jugadores de Kimberley por haber dejado escapar una oportunidad inmejorable de poner un pie y medio en el Argentino B y de los de Tres Algarrobos casi festejando la derrota por la mínima diferencia que dejó la serie totalmente abierta para una revancha, en siete días, que será apasionante, seguramente mucho más trabada que el primer partido, y en la que el “dragón” con un empate logrará el ansiado y merecido ascenso.
Síntesis
Kimberley (2): Guillermo Benítez; Sebastián Corti, Diego Álvarez, Jonatan Romero y Juan Cebada; Damián Zamorano, Pablo Murno, Julián Servera y Matías Ferreira; Damián De Hoyos y Leandro Parra. DT: Damián García.
FC Tres Algarrobos (1): Antonio Carreras; Antonio Pérez, Gastón Bornes, Ezequiel Echeverría y Facundo Arauz; Nicolás Gottardi, Franco Dalmao y Sergio Almirón; Sebastián Santos; Raúl Gómez y Ariel Hertel. DT: Pablo Tabasso.
Goles: 26 ’PT De Hoyos (K), 35’ PT Murno, de penal (K) y 26’ ST Santos (TA).
Cambios: 0’ ST Ángel Ariznabarreta por Pérez (TA), 36 ST Francisco Grande por Zamorano (K), 38’ ST Franco Giménez por Hertel (TA), 43’ ST Juan Del Potro y Leonardo Barros por Murno y Ferreira (K).
Árbitro: Lautaro Andreis, de Bahía Blanca.
Estadio: “José Alberto Valle”, de Kimberley.
Verde esperanza
Una gran concurrencia mostró el estadio de Kimberley para la primera final. Una mañana inmejorable de sol acuñó a los más de 200 hinchas que llegaron de Tres Algarrobos y a los marplatenses hinchas o no del "dragón" que se acercaron a presentar un interesante espectáculo futbolístico. El comportamiento tanto adentro de la cancha como afuera fue ejemplar y si bien es lo que corresponde, no se puede dejar de destacar.
Acalambrado
Damián Zamorano no pudo tener la preponderancia de otros encuentros pero igual mostró momentos de buen juego y fue importante en el primer gol con un cambio de frente desde la derecha. En el complemento, además de generar fue uno de los impulsores de la gran presión del medio local y lo pagó caro. Primero, a los 15´, luego de meter un pelotazo para Parra se quedó tirado a un costado y debió ser ayudado por el kinesiólogo Fabián Plaza Palacios. Sobre los 35', otra corrida en el mismo sector terminó con el partido del "10", que salió con un fuerte calambre pero no tendrá inconvenientes para estar en la revancha.
Vuelve el capitán
Carlos Gabutti se moría de ganas de jugar el encuentro pero sabía que se arriesgaba a una lesión más importante y que su equipo perdiera un cambio rápidamente. Entonces, miró el partido desde afuera pero ya confirmó que estará en Tres Algarrobos con la cinta en el brazo izquierdo y se lo espera con los brazos abiertos por lo que significa para el grupo y su importancia en la pelota parada en contra, la principal falencia de Kimberley en este torneo.
Domingo 12 de mayo de 2013, 19:07
El domino explota el PEDRO TARTARA para revertir esta gran final!!! Toda la fe en vos querido FCTA